Graham Bell se ha convertido en la persona que ha alcanzado la mayor velocidad sobre unos esquís arrastrado por un coche. Es un record peculiar, pero record al fin y al cabo. La hazaña la logró el fin de semana del 7 y 8 de Marzo de este pasado invierno en un lago helado del norte de Suecia. De esta forma alcanzó las 177 millas por hora, lo que vendría a ser algo más de 188 kilómetros por hora.
Desde luego es una cifra espectacular, pero eso nos permite hacernos una idea de la valentía de los hombres del Kilómetro Lanzado, la modalidad del esquí en el que el esquiador trata de alcanzar la mayor velocidad con la única ayuda de su impulso, una pista bien empinada y una excelente habilidad para causar la menor fricción al viento... sin caerse. El record lo tiene el italiano Ivan Origone con 254,958 km/h, 70 km/h más que lo que nos ha mostrado el exesquiador olímpico Graham Bell.
De todas maneras no hay que quitarle mérito al británico ya que tampoco debe ser fácil tener la sangre fría como para atarte a un coche con un cable y dejarte arrastrar a toda velocidad por un lago helado sin más protección que tu cuerpo.
El record lo logró gracias a la marca británica Jaguar, quien puso a disposición de Graham, un XF Sportbrake con motor 3.0 V6 sobrealimentado por compresor y con 380 CV de potencia. El mismo que el año pasado.
La diferencia de la marca, más de 76km/h entre un año y otro, se explica por el lugar donde se hizo la carrera este invierno de 2017: el Centro de Pruebas del Círculo Polar Ártico de Jaguar Land Rover, en Arjeplog, a -28ºC. Un lugar muy frío, pero también un ambiente muy seco y sin casi viento. Al menos ese día!.