Rey ha concretado que la empresa adjudicataria tendrá tres meses para elaborar el informe. Tras ubicar el lugar, se definirán y valorarán económicamente, entre otros aspectos, las infraestructuras, edificaciones, pistas, accesos y demás elementos necesarios para el funcionamiento de la estación de esquí como puede ser la línea eléctrica necesaria para el suministro eléctrico de la estación, los accesos, el aparcamiento para los vehículos, red de remontes e innivación artificial, medidas correctoras y de restauración medioambiental del entorno que contribuyan a reducir el impacto de la estación. Rey ha explicado que otra parte importante del estudio de viabilidad será el análisis de la demanda "como parte esencial de cara a determinar la viabilidad económica del proyecto".
Además, se aportará una tabla comparativa donde figuren las distancias en kilómetros y los tiempos de conducción aproximados entre el aparcamiento de las estaciones de esquí alpino existentes actualmente en territorio español y el centro de las siguientes ciudades: Madrid, Zaragoza, Bilbao, Vitoria, San Sebastián, Pamplona, Burgos, Valladolid, Palencia, Logroño y Soria.
El adjudicatario del estudio deberá aportar también otra tabla comparativa en la que para todas y cada una de las estaciones de esquí alpino actualmente existentes en territorio español queden reflejados aspectos como cotas máxima y mínima, kilómetros de pistas esquiable, orientación predominante de las mismas, titularidad de la estación, forma de gestión de la misma, y afluencia de esquiadores que en promedio anual de los últimos cinco años han abonado forfait en cada una de las estaciones según una fuente contrastada.
Según ha explicado el presidente de la Diputación, el estudio de viabilidad tendrá que reflejar también los ingresos y gastos previstos, la amortización, o los flujos de caja y análisis de rentabilidad,