El optimismo se ha colado en el sector del esquí tras las últimas nevadas caídas, en las que en algunas estaciones como
Vallter 2000, han dejado
medio metro en cotas de 2.400, y 30 centímetros en la de 2.000. La perturbación, que ha durado cinco días, ha permitido poder ver la primera imagen puramente invernal a la estación del Ripollès.
| | La nevada ha alcanzado a Boí Taull |
Las precipitaciones, que apenas han dado tregua en los pocos días del mes de Noviembre que llevamos, se están convirtiendo en nieve en muchos puntos del Pirineo. En Certascán los espesores ayer por la tarde ya eran de
66 centímetros, y en la Bonaigua de
44, mientras que en algunos puntos de la Vall d'Arán, han acumulado entre
60 y 70 centímetros, según datos aportados por los servicios de meteorología de la Generalitat, que ha advertido del riesgo de aludes en situaciones como la actual, con nieve abundante en cotas altas al inicio de temporada.
Algunas estaciones valoraban ayer la posibilidad de
adelantar el inicio de temporada al 26 de noviembre, si el frío y las precipitaciones se mantienen las próximas semanas. De hecho, aunque en
La Molina la nevada apenas ha enblanquecido las montañas, sí han puesto en marcha el sistema de nieve artificial y sus máquinas pisa nieves se han puesto a trabajar. Esperan poder abrir el día 26 de este mes.
También en
Masella se han puesto a trabajar, en este caso para abrir el primer fin de semana que puedan habilitar pistas para el esquí, mientras que en
Vall de Núria no se iniciará la temporada hasta el 3 de Diciembre, porque la estación y su acceso está cerrada hasta el día 1.
Imágenes de la nevada en Vallter 2000: