Saltos de hasta 80 metros, pendientes de hasta el 85% y velocidades de mas de 140 km/h. Menos de 2 minutos de bajada en un recorrido de 3,3 kilómetros, 863 metros de desnivel desde la salida (1.665 m) hasta la meta (802 m). Más de 103 km/h de velocidad media. Sin duda, y con perdón de los suizos y su Lauberhorn, esta es la pista de esquí con mayor dificultad del mundo.
Los peores accidentes del curcuito
Kitzbuehel lleva organizando carreras oficialmente desde 1931. En 1935 se habilita el trazado de Bruckenschuss, pero en la década de los '40 las carreras de Descenso y Slálom se trasladaron definitivamente a la Streif y Ganslern respectivamente.
El accidente de Scott Macartney en 2008 enmudeció el estadio entero. Ese día cumplía sus 30 años. Como pasó la meta, su tiempo contó. Quedó el 33º y se recuperó más rápido de lo esperado. |
El último gran cambio para la Streif llegó en 1994, cuando se modificó el salto del Seidlalm, para dar mayor seguridad, y se aprovechó para instalar un sistema de nieve artificial. La pasada temporada se le triplicó la captación de agua.
Y es que sobre la pista del Streif se han vivido algunos de los peores accidentes del circuito de Copa del Mundo. Todavía están presentas las desgarradoras imágenes de la caída del suizo Daniel ALbrecht en 2008. El corredor quedó en coma inducido, pero un año después comenzó a caminar. Este año incluso ha llegado a participar en alguna prueba de Copa del Mundo. Unos años antes, en 2004, era el norteamericano Scott Macartney quien enmudecía el estadio con una imágen bastante impresionante del corredor languideciendo en el suelo mientras padecía fuertes convulsiones.
Siete millones de inversión en la Streif
Pero ojo al dato, solo este verano se han invertido 7 millones de euros en arreglar esta ya veterana pista. Y es que a las carreras de este fin de semana, bautizado como Hannenkamm, vienen personalidades y famosos de todo el país. De hecho ya se ha visto por la zona a Arnold Schwarzenegger, el ex-Gobernador de California nacido en Austria, y para todos los asistentes (se calcula unos 60.000 los tres días, 40.000 de ellos para el Descenso) hay que dar seguridad, y espectáculo.
Este verano se ha estado trabajando en las zonas de Bruckenschuss, Gschosswiese, Gschoss y Alte Schneise. El Bruckenschuss se ha acortado tres metros y se ha levantado tres metros. La pendiente del Gschoess se ha incrementado un 7% y deja por tanto de ser la parte más llana del trazado, y ayudará a subir la velocidad media de la carrera. Aquí también se han puesto más redes de protección. El Gschoesswiese se ha ensanchado tres metros y se han quitado árboles a ambos lados de la pista, sobretodo en la zona de Alte Schneise, que se ha ampliado bastante. Finalmente, el punto de entrada a meta de Seidlalm se ha recortado para que los espectadores ganen en visualización.
Al mismo tiempo se ha creado un camino paralelo tanto para esquiadores como peatones a lo largo de la pista para que nadie se pierda detalle de cada tramo. Al mismo tiempo, el trazado del Super-G (se disputa el viernes) se ha movido 25 metros más arriba para poder proporcionar un inicio de carrera con más impulso, y se han creado curvas a derecha-izquierda en el comienzo de la carrera.
Fibra óptica, nuevas pantallas para seguir la carrera, redes de pritección más moderna y ampliación del sistema de nieve artificial instalado en 1993, completan los 7 millones de inversión solo en la Streif de los 30 millones que se ha gastado Kitzbuehel en mejoras y remontes este verano en toda la estación.
Según los organizadores, todas estas obras van a dar mucho más espectáculo y sobretodo seguridad. Así que este fin de semana todo el mundo espera que caiga el récord de velocidad que tiene Didier Defago, ganador del Descenso del año pasado, cuando alcanzó los 142,3 km/h, o al menos el de la prueba, en manos del austriaco Fritz Strobl, quien en 1997 la bajó en 1:51.58.
La Hahnenkamm de 2011
Hahnenkamm es el nombre que se le da al fin de semana de pruebas de Copa del Mundo. Se disputarán un Slalom, una Supercombinada, el Descenso y el Super-G. Las condiciones pintan bien. Justas porque estamos en unos días de temperaturas demasiado suaves en toda Europa, pero se mantienen los 75-80 centímetros de nieve bien compactada. De todas maneras, y como viene siendo costumbre desde hace años, el 24º Batallón de Alta Montaña, dirigido por el Coronel Gerhard Pfeifer, se preocupará porque no falte la nieve y todo esté en perfectas condiciones.
Hoy se han tenido que cancelar los entrenamientos por lluvia, pero a partir de mañana se espera nieve de nuevo, bastante, para volver a brillar el sol el Sábado.
Como decíamos anteriormente, los suizos se han quedado los últimos tres Descensos de la Streif. Didier Cuche lo hizo en 2008 sobre una pista algo recortada por las condiciones. En 2009 ganó Didier Défago, y en 2010 Cuche volvió a demostrar que era capaz de ganar desde mas arriba o mas abajo. Ese mismo fin de semana ganó también el Super-G, una prueba que el año anterior había ganado el austriaco Klaus Kroell y en 2008 el retirado Marco Buechel.
Pero sin duda el héroe de Kitzbuehel es Hermann Maier. En 2001 dejó claro que se iba a convertir en la leyenda local cuando ganó por 27 centésimas sobre su compañero de equipo Hannes Trinkl. Entre 2000 a 2006, 'Herminator' también ganó cinco veces el Super-G y una vez quedó segundo.
Para 2011, y pese a sus ya 36 'tacos', no podemos dejar a Didier Cuche (Head). La cosa pinta bien para los suizos, porque actualmente los favoritos podrían ser Carlo Janka (Atomic), con dos podios la semana pasada en Wengen, y Silvan Zurbriggen (Rossignol). Cualquiera de ellos podría ampliar la racha suiza de tres veces consecutivas ganando en el 'estadio austriaco'. Los austriacos tienen a Michael Walchhofer (Atomic) que podría continuar con su buena racha y lograr su segunda victoria en Hannenkamm tras su victoria en el Descenso de 2003. Y no hay que olvidar a sus compañeros de equipo Mario Scheiber (Atomic), Romed Baumann (Salomon) y Klaus Kroell (Salomon) (ganador del Descenso de Wengen 2011).
Pero ojo, que podría ser que suizos y austriacos se quedasen sin trofeo, y se lo llevase un 'vikingo'. Aksel Lund Svindal (Head) segundo en la General, podría convertirse en el primer noruego en ganar aquí desde que Lasse Kjuss ganase en 2004. Menos posibilidades tiene el lider de la General, Ivica Kostelic (Fischer), más hábil entre los palos. La sorpresa es un factor siempre a tener en cuenta. El año pasado el esloveno Andrej Sporn (Elan) a punto estuvo de llevarse el trofeo, hasta que Cuche lo relegó a la segunda posición por tan solo 26 centésimas. El reparto de premios es el mayor del circuito: 550.000 euros.
Los precios para vivir en directo esta carrera es de 17€ a 25€ los tickets para adultos, y gratis para niños y jóvenes hasta 15 años. También hay enradas VIP a partir de 55€, 90€ en una gradería VIP, o 400€ por un camerino VIP. Para el resto de los mortales nos queda la tele. Eurosport retransmite el Descenso en directo a partir de las 11.30h del Sábado. 90 minutos de esquí hasta las 13h.