Operadores responsables del 90 por ciento de la comercialización del producto Bariloche en Brasil dispararon duras críticas contra la ciudad y advirtieron que hasta Nueva York y Cancún son destinos más baratos. La falta de limpieza en las calles, los precios elevados, la ausencia de veredas, la inexistencia de menús en portugués en algunos restaurantes y el mal manejo del equipaje en las excursiones internacionales, figuran en una extensa lista de reproches.
Para los operadores de Brasil, Bariloche es más caro que destinos como Cancún y Nueva York, y eso atenta contra la posibilidad de venta de la ciudad, según un informe de la agencia de noticias local ANB publicado hoy por el diario El Cordillerano. Según este informe, los empresarios brasileños señalaron que "una vez en la ciudad, los turistas encuentran problemas como la inexistencia de veredas en algunos paseos; los pastizales y basurales que bordean rutas y caminos, así como la falta de limpieza en la zona céntrica".
Los operadores manifestaron que, además de bajar los precios, los empresarios locales deberían ofrecer tarifas con mayor antelación, para poder componer los paquetes con seguridad sobre el coste final. Cuestionaron asimismo "la inexistencia de Hoteles de 3 y 4 estrellas de calidad, marcando una notable diferencia entre el alojamiento de máxima categoría y el resto".
El listado de quejas incluyó también que en el Cerro Catedral se superpone la actividad de esquí entre los más expertos y los principiantes, y que no existe un calendario de actividades en la ciudad. Finalmente, apuntaron también a problemas de infraestructura de Puerto Pañuelo y al manejo del equipaje en la excursión internacional Cruce de Lagos.
Los empresarios viajaron a Bariloche en una visita organizada por el sector privado local, con el acompañamiento del EMPROTUR, la Secretaría Municipal de Turismo, y el Ministerio de Turismo provincial. La visita se enmarcó en el proyecto de instalación de la iniciativa "Bariloche todo el año", que busca romper con la estacionalidad que hoy conlleva la venta casi exclusiva del producto nieve.