El gerente de
Pallars Industrials, Josep Miquel Messegué, mostró su satisfacción a la salida de la reunión y explicó que
“los acreedores han apostado por la continuidad de la empresa”, aunque eso sí, el siguiente paso es
“entablar conversaciones con el Institut Català de Finances”, entidad con la que contrajeron una deuda de
catorce millones de euros. Messegué dijo que ahora espera que haya un acuerdo con la entidad
“para la buena continuidad de la empresa y fortalecer así un proyecto de futuro”. Añadió que la voluntad de Pallars Industrials es satisfacer dicha deuda y por ello buscarán
”una solución definitiva para trabajar con una garantía sólida”.
Josep Miguel Messegué ratificó que será el
25 de noviembre la fecha de apertura de temporada del complejo de esquí. Para ello, ya se están poniendo en marcha los cañones de nieve artificial.
Los hechos se remontan al año 2005, cuando el complejo de
Port Ainé inició un procedimiento concursal al no poder hacer frente a los pagos de créditos por valor de
13 millones de euros concedidos por el
ICF. En el caso de que los acreedores no hubieran aprobado el convenio, el ICF podría haber instado al inicio del proceso de liquidación de la empresa.