Infraestructuras repara los sistemas antialudes del acceso a San Isidro

Los equipos de conservación de la Consejería de Infraestructuras han procedido, una vez concluida la temporada de esquí, a la reparación de los daños ocasionados por la nieve en la carretera de la vertiente asturiana del puerto de San Isidro (AS-253). Los trabajos se centraron en la zona del Mirador de Zuvillaga, donde se han restaurado las barreras metálicas colocadas a distintas alturas con el objetivo de detener los aludes que, con cierta frecuencia, terminan en la calzada y originan cortes de trafico.

Pese a esta actuación, los alleranos y los usuarios de la carretera siguen apostando por la sustitución de estos sistemas por viseras de hormigón que sirvan para que las masas de nieve desprendidas pasen por encima de la carretera para caer al precipicio. El equipo municipal de gobierno, integrado por PSOE e IU, también ha solicitado al Ejecutivo regional un estudio detallado del peligro de aludes que hay en el acceso al puerto y la puesta en marcha de medidas que eviten situaciones de riesgo.

Las labores de las últimas semanas también han permitido solucionar el argayo que se produjo en un tramo situado entre Riofrío y El Fielato. Los operarios de Infraestructuras han procedido a fortificar la zona, que amenazaba con hundirse, mediante la construcción de una contención.

Otro enclave afectado por la nieve ha sido el que se corresponde con el punto kilométrico 20 del Corredor del Aller y Los Areneros. Los escombros procedentes de un desprendimiento se llevaron por delante más de veinte metros de banda metalizada de seguridad y algunas señales de tráfico. Pese a que se colocó una nueva banda, la antigua y los indicadores permanecen incomprensiblemente abandonados en el talud inferior.