Fallece un esquiador sepultado por un alud en la Vall de Boí

Un esquiador francés murió ayer por la tarde al ser sepultado por un alud en la zona del lago Port de Caldes, en el Valle de Boí, aunque su cadáver no ha podido ser recuperado aún porque las adversas condiciones meteorológicas han impedido salir a los equipos de rescate.

Según ha informado hoy la Dirección General de Emergencias, la víctima, que practicaba esquí de montaña en una zona próxima al lago Port de Caldes, murió sepultada por una avalancha cuando estaba realizando un travesía entre las comarcas leridanas de Alta Ribagorca y Vall d'Aran junto a dos compañeros, también franceses.

Los dos esquiadores que acompañaban al fallecido pudieron localizarlo y sacarlo de entre la nieve gracias a que llevaba un dispositivo mecánico que emite sonidos, pero no consiguieron reanimarlo.

Los compañeros del fallecido se dirigieron entonces al refugio Colomers de la Vall de Boí para avisar a las autoridades y señalizaron con una mochila y una pala el lugar donde dejaron el cadáver del esquiador muerto para facilitar su localización por los equipos de rescate.

Las adversas condiciones meteorológicas y el riesgo "fuerte" de aludes en la zona -nivel cuatro de un total de cinco- han impedido a los Pompiers (bomberos) de Aran y a los Mossos d'Esquadra acceder al lugar en el que está el cadáver.

Si mañana mejoran las condiciones meteorológicas, se incorporará a la búsqueda un helicóptero que sobrevolará la zona y transportará a los equipos de rescate.

Tanto Pompiers d'Aran como los Mossos d'Esquadra tienen preparados los dispositivos de rescate para ir a buscar el cadáver del esquiador fallecido si las condiciones meteorológicas lo permiten mañana.*

Fuentes del Servicio Meteorológico de Cataluña han advertido hoy de que el riesgo de aludes es "fuerte" en las comarcas leridanas de Vall d'Aran y Alta Ribagorca, donde en las últimas 48 horas se han acumulado gruesos de nieve de entre 40 y 60 centímetros, sin demasiados anclajes.