La asociación ecologista considera que «la única razón por la que se plantea este proyecto es para el desarrollo urbanístico de la zona con el único resultado del incremento de las urbanizaciones y la desnaturalización de una zona de alta montaña».
ANA afirma también que el proyecto afecta de forma grave a un área de distribución del oso pardo. Por todo ello, Lastra asegura: «El proyecto tendrá un efecto impactante en un área de gran fragilidad geográfica y con grandes valores ambientales. Además el proyecto no es viable en su aspecto deportivo».
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