Es el caso de Masella, con unos 8.300 forfaits vendidos, y donde el dia de ayer ya es califica como uno de los mejores inicios de las fiestas navideñas de estos últimos años.
También en La Molina hubo una gran afluencia, con 6.000 forfaits vendidos.
Si se mantiene el buen tiempo, estas cifras crecerán «y se podrá disfrutar de unas condiciones óptimas que otros años no teníamos», explica Marta Viver, de La Molina, teniendo en cuenta que la abundància de nieve permite a las estaciones abrir todos los remuntes y evitar grandes aglomeraciones.
El esquí de fondo es más minoritario, pero ayer también hizo su agosto. Lles tuvo unos 250 esquiadores, y en Aransa, con unos 160, se triplicó el número de forfaits expedidos respecto al dia anterior. Y es que, como cada año, la Cerdanya no se llena hasta pasado Navidad y Sant Esteve, «perquè la gente mantiene la tradición de pasar la Navidad en el entorno familiar, y esto se nota, porque hasta ayer no había casi movimiento», explica Joan Mateu, de la tienda Galeries de Prades, de Puigcerdà.
En la mimam calle, desde la tienda Ginesta, su propietario, Frederic Ginesta, asegura que durante estas fiestas se llega a «un volumen de ventas muy importante» que ayer ya se comenzó a producir.
Fuente: