Durante el mes que durarán estas trabajos de mejora y recuperación de las instalaciones, está previsto que se revisen todos los remontes y se pondrá a punto el hotel así como la infraestructura propia de la estación de esquí.
Con este parentesis en la vida de la Vall de Núria, también se aprovechará para cerrar el tren cremallera, el único medio motorizado con el que se puede acceder por tierra hasta esta área de los Pirineos de Girona.
Esta parada del emblamático medio se aprovechará para realizar pequeñas obras de mantenimiento a lo largo de la infraestructura entre Ribes de Freser y la Vall.
La apertura de la estación de esquí está prevista para principios del mes de Diciembre si las condiciones metereologicas lo permiten, según explicaron los responsables de las estación.
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