Situada en el Ripollés y a tan sólo 12,5 kilómetros de Ribes de Freser, la primera curiosidad de Núria la da ya su acceso. Sólo se puede llegar a la estación mediante un tren-cremallera, lo que hace más atractiva la estancia.
La ausencia de vehículos a motor y la obligada limitación en la afluencia hace que todo el valle sea un remanso tranquilo y sin las aglomeraciones de tantos otros centros de invierno.
El gran edificio del Santuari es el núcleo de la estación y en donde se encuentran los diversos servicios. Allí se reparte el alojamiento en el complejo hotelero, los renovados apartamentos y un establecimiento comercial en el que también es posible equiparse para el esquí, el snowboard y las demás actividades en la nieve. La propia estación, que está gestionada por Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya, tiene varias exposiciones permanentes en las que pueden apreciarse diversos aspectos del valle y de su historia.
El techo, en el Pic de l'Àliga
El Pic de l'Àliga (2.428 m.) domina el campo de nieve de la estación, siete kilómetros para un total de 10 pistas, a las que hay que sumar un recorrido de trineos y la zona del parque infantil. El recorrido más largo es de 1,8 kilómetros.
La estación tiene cuatro remontes mecánicos, un telecabina, un telesilla y dos telesquis. Las cabinas, en la Coma del Clot, forman una de las imágenes más características de la estación.
Pero al margen de las pistas balizadas y preparadas para el esquí alpino, la Vall de Núria es uno de los lugares más apropiados para disfrutar del esquí de montaña, modalidad que tiene una larga tradición en esta zona del Pirineo de Girona, donde también pueden practicarse otras actividades deportivas como las raquetas de nieve, los trineos, el telemark y el tiro con arco
Un atractivo recorrido en tren para llegar
El popular tren-cremallera de Núria ya merece una visita a la estación. Son 12,5 kms. entre Ribes de Freser y Núria, con una parada intermedia en Queralbs. El pequeño convoy hace un recorrido de 45 minutos junto a desfiladeros espectaculares. Un tramo es sobre una vía férrea convencional y el más empinado, mediante un engranaje de cremallera. La trabajosa construcción del trayecto se inició en 1928 y tres años más tarde fue inaugurado de forma oficial. Desde los años 80 se han renovado diversos tramos
Líder en la gestión medioambiental de su entorno
La estación es un modelo en cuanto al respeto al entorno natural. Vall de Núria ha implantado un sistema de gestión medioambiental, de acuerdo con las exigencias de la norma UNE EN ISO 14001. Este programa incluye todas las actividades relacionadas con el tren-cremallera, la estación de esquí, el complejo hotelero, el Santuari de la Mare de Déu, la tienda, el dispensario, la hípica, las barcas del lago, las salas de exposición y el auditorio, así como el servicio de guías de la estación. Por otra parte, la estación ha recibido también la 'Q' de calidad que otorga el Instituto para la Calidad Turística Española para galardonar a los centros de turismo y ocio que ofrecen unas mejores instalaciones y servicios
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