Ski Andorra encargó un informe a una empresa especializada para que estudiase la viabilidad y una de las posibilidades con más salida es la fusión total de las sociedades, tanto privadas como públicas, que gestionan actualmente las estaciones.
Esta opción comportaria la creación de una empresa con más de 12 millones de euros de beneficio tras las armortizaciones anuales, según explica Enric Dolsa, presidente de Ski Andorra y cónsul mayor de la parròquia de Ordino.
EL informe preve una variable de fusión menos traumática, a medio plazo (6 años), a través de un sistema dinámico, o bien dejar que cada estación funcione por si sola y que Ski Andorra gestione los forfaits. Esta última alternativa, según Dolsa, sería la menos viable, ya que es muy similar al actual producto del forfait 'cinco estaciones'.
Dolsa se posiciona abiertamente por la fusión menos traumática, ya que, "en una perspectiva nacional, la mejor manera de vender nieveu fuera del país es conjuntamente y si la gestióna solo una, los esfuerzos en cuanto a costes serían menos importantes que los que hacemos hoy puntualmente". El cónsul y presidente de Ski Andorra hace estas declaraciones a título personal y no en representación de los cargos que tiene, afirma.
SITUACIÓN ACTUAL
Hace dos semanas que el informe se presentó a todas las partes que representan los capitales sociales de las sociedades que gestionan las estacions de esquí.
En la presentación se dieron algunas cifras y se acordó que cada estación estudiaria en privado las posibilidades de èxito que planteava el informe para decidir si se daba luz verde para seguir adelante y encargar nueva fechas o bien, si se paraba el proyecto.
Si va adelante, la empresa encargada de elaborar el informe seguiria aportando más información sobre la futura unió.
Todas las partes aseguran que con buenos ojos el proyecto, aunque hasta el mes próximo no se sabrá si están de acuerdo.
En cuanto a Pas de la Casa-Grau Roig, mayoritàriamente de capital privado y que podría presentar dudas en cuanto a la vinculación, Dolsa asegura que Joan Viladomat, director de Saetde, es uno de los más implicados en la idea.
A un lado Pas de la Casa Grau-Roig, al otro, Soldeu
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