Ordino-Arcalís abrirá las pistas el fin de semana del 23 y 24 de este mes, mientras que la estación de fondo, La Rabassa, prevé ponerse en funcionamiento para la Purísima.
La primera nevada de la temporada no ha servido para hacer avanzar las fechas de apertura de las estaciones de esquí de Andorra. Solo Ordino-Arcalís ha previsto el inicio de la temporada una semana antes de lo habitual, el fin de semana del 23 y el 24 de este mes, y, aún así, ja han aplazado la previsión inicial del Comú, que era abrir el día 17.
Dimitri Carcassone, responsable de comunicación de la estación, explicó ayer que, "aunque la semana pasada cayeron hasta 40 centímetros de nieve, el viento se la llevó". No obstante,, confia en las predicciones atmosféricas, que han anunciado más nieve para final de semana, y en las bajas temperaturas para producir nieve artificial.
Pal-Arinsal y Soldeu-el Tarter son las otras dos estaciones que intentarán abrir el último fin de semana de mes con la ayuda de los cañones de innivación. En cambio, Pas de la Casa-Grau Roig es más pesimista y la estación no quiso avanzar ninguna fecha de apertura porque todo depende del tiempo, aseguraron fuentes del complejo de invierno. Noobstante, esperan abrir como muy tarde a comenzamientos del mes próximo.
La estación de esquí nórdico de la Rabassa es la estación que ha previsto abrir más tarde y confía disponer de un grueso de nieve suficiente para ponerse en funcionamiento para el puente de la Puríssima.
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