Con un escueto y casi críptico “Tienes mi autorización formal”, Quione me ha dado permiso para publicitar la pupa que se ha hecho, a condición de que no diga su nombre. Paso rápidamente a relatar el acontecimiento en sí mismo considerado:
Ayer, el grupo de insignes foreros Nevasportianos se hallaban bajando una pista negra con bañeras de más de un metro de altura, con olas fuerza 4, conocida en la zona como “Mathüstralleskorchoff” (que en lengua aborígen siginfica “La-pista-donde-te-toñas-y-la-rodilla-se-hace-mierda”), y Quione (permitidme que siga manteniendo su nombre en el anonimato, pero ella lo ha querido así), que se ha enterado de la traducción del nombre de la pista después de bajarla, quiso experimentar en primera persona la hermosa sensación de ser descendida en moto-camilla por un apuesto pistero austriaco (alto, rubio, guapo, simpático, inteligente, con don de gentes... -o sea, como yo, pero en rubio-). Y lo consiguió. Ya metida en harina, nuestra protagonista pensó para sus propios adentros -“
Pues si está así el motonievero, cómo estarán los médicos...” Y para el hospital que se fue: que si me duele la rodilla, que si tal, que si cual... (todo esto en alemán, que duele más) Total, que tan embelesada estaba con los galenos, que hasta tuvieron que operarla para recomponer su rodilla y que así les dejara en paz. Como recuerdo de su estancia en la clínica la han regalado una estupenda rodillera a estrenar, y unas muletas que para sí querría el mismísimo Curro Romero. Estamos a la espera del material gráfico que nos ilustre fehacientemente sobre su situación; tal vez a la noche llegue algo.
Felizmente todo ha salido bien. Ahora reposo y a curarte
Obergruppenashler.
[N. del A.: Puede que el relato no se ajuste completamente a la realidad. Algunos de los médicos citados puede que fueran feos. Ningún animal, vegetal, o cosa, ha sido maltratado durante la redacción de este post.]
) tienen que tener una juerga ahi montada de aupa.
No cambio el Nenuco por nada del mundo.
