Completamente de acuerdo con las últimas consideraciones (Mario, MadMax).
La medida no es una ciencia exacta, y aunque el cálculo del codo recto es correcto, no es un dogma.. luego hay que adaptarse ligeramente a la técnica y forma de esquiar.
No todas las personas tienen la misma proporción matemática de su estructura ósea, ni todas tienen el mismo grosor en la suela de la bota ni la misma altura de las fijaciones y el esquí, por lo que puede variar unos cuantos centímetros arriba o abajo.
Yo mido 1,82 y hasta ahora llevaba bastones de 130 cm. Hace poco me compré unos Leki automáticos (maravilla oiga) y me bajé a 125 cm, 5 cm de diferencia que he agradecido mucho por que me permiten hacer mejor el clavado de bastón en la posición en la que suelo esquiar (gorileando
)