Las redes sociales nos mostraban estos días la impresionante nevada en los Alpes austríacos, como por ejemplo, Lech Zürs


Pero esta temporada los Alpes están más lejos que nunca, por lo que Mikel y yo continuamos nuestra peculiar temporada en el Pirineo navarro. Dado que por la mañana el puerto de Belagua se anunciaba cerrado desde la parte baja, cambiamos nuestro destino y partimos hacia Roncesvalles. El día, no muy frío y soleado, nos ha permitido disfrutar de una agradable subida por ese magnífico bosque, que no serán las coníferas tirolesas con sus " trigüels " pero tienen lo suyo también.
Habríamos querido subir al Ortzanzurieta, pero la nieve en la parte alta estaba como mármol, por lo que en el Mendimotx hemos quitado pieles y comenzamos a bajar.
Para la comida hemos parado en Burguete, y hemos pedido codillo para también recordar comilonas alpinas de temporadas pasadas

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