A la Chula le encanta el agua, pero desde la orilla, y siempre que le llegue el agua más o menos hasta la barriga. Le gusta también enfrentarse a las olas, pero se le mete el agua salada por la nariz y luego se tira dos días estornudando.
Por la playa, en invierno, porque en verano la Ley de Costas y los Ayuntamientos prohíben el paso de seres racionales (perros) y permiten el de los irracionales (chicas con hilo dental y tarzanes de gimnasio), paseo a la Chula.
Observo los siguientes rituales:
A) Corre en círculo sobre la arena, rápidamente
Come pescado podrido (dice el veterinario que porque necesita sales minerales)
C) Socava mis cimientos: cuando me siento en la arena se pone a mi lado y escarba rápida y profundamente por debajo de mi trasero hasta que me hundo. Creo que es una perra anarquista.
En fin que los perros son grandes amantes del mar y la playa. También les gusta navegar, pero en los veleros lo tienen jodido, ya que al escorar en las ceñidas, les es muy difícil mantener el equilibrio.
Debo indicarte, por último que la casa Plastimo de suministro de efectos navales tiene unos modelos de salvavidas caninos ralmente prácticos
Una consideración final: Si no hubiera perros, no querría vivir, decía el misógino Shopennhauer......