Joer vaya regalito, aunque al que se lo vendiste hizo también un buen negocio, habrá que mirar la proxima vez jajaja
Una anecdota graciosa en Baqueira fue en una silla que venian unas niñas del club de esqui del vall de aran, eran unas pijas redomadas, pero lo mejor la conversación, una decía que su ilusión era ser pistera por la cantidad de cosas de valor que se podría encontrar, ver para creer
Lo mejor era como se insultaban, una le decía a la otra, tía eres una etarra... Esto seguro que lo llevaban aprendido de sus papás.