...y el domingo esquiamos
El domingo a las 8h de la mañana llegué al Cortijo, y primera alegría del día, José Miguel estaba allí presto a desayunar, me recibió con su gran sonrisa y un abrazo que casi me deja sin costillas
y Carlos-doo-Woop que, a pesar de sus múltiples tribulaciones, se había dignado en aperecer por fin.
Se mascaba la tensión en el ambiente ¿abrirán, no abriran? y el sueño también, sobretodo por mi parte
. Tras desayunar y repartirnos en algunos coches nos dirigimos hacia la meta ansiada, Sierra Nevada.
No os podéis imaginar mi alegría cuando Angel12, mi buen conductor, bastante antes de llegar me dijo
¡los telecabinas funcionan! 
Luego, lo habitual, que si subimos por el Jara o no, que si espera que me ponga los esquíes, que si voy al baño, que si ensayamos con los walkies. Por cierto ya no se ríen, tanto, de mis esquíes sino ahora la han tomado con mi micrófono estilo Madonna (de Mcdonalds nada
).
Disfrutamos de las primeras bajadas y se unen a nosotros Sonic, Pet y Roberto. Debido a algunas paradas técnicas (vuestra mamá no os dice que hay que ir al baño antes de salir
) nos dispersamos, pero con los gualkies, a pesar de algunas interferencias, y conversaciones de besugo, nos reagrupamos para la cita en el telesilla veleta. Casí una hora tarde eso sí
(en nombre de todos pedimos disculpas). Es hora de posar con nuestras mejores galas.
Por favor no miren hacia la esquina derecha
¡qué estilo!
y estas por si alguien no se reconoce
si ya sé que falta el nombre de uno, es mi pequeña venganza
Luego volvimos a nuestros asuntos, esquiar como locos, y a pedernos, y a reencontrarnos. En todo este tiempo por lo visto mis inalámbricos causaron ciertas molestias auditivas
Continuará...
Galadriel
, nos dedicamos en cuerpo y alma a la cata de vinos y distintos manjares, a planificar y ensayar varias estrategias de asalto a la barra del bar lleno hasta la bandera y al calentamiento muscular de mandíbula y abdominales obligándonos a reir sin parar durante toda la velada.
. Bueno haré de tripas corazón, y nunca mejor dicho. Nos trajeron una fondue de queso, fría y sin hacer que AntonioB se encargó de remover ante mi mirada horrorizada 
k desastre, me teng k acostar..
a lo que joseluinnn contestó con toda naturalidad:: sí, y soy amigo del David el gnomo y volvió a desaparecer en la oscuridad de la noche en su coche blanco.
