Acabo de regresar de S. Nevada, tras un rápido viaje. Llegué a las cinco de la tarde, y todo era un magnífico caos. Un desordenado orden de la naturaleza como decía Sto. Tomás.
Sólo que en este caso, el desordenado orden lo ocasionaba la incompetencia del Ayuntamiento de Monachil, que no sé si será Excmo. o Ilmo., lo que si se es "incompetentísimo".
Sólo habían abierto un carril de la anchura de un coche, no ya en la Urbanización, sino incluso en la Plaza de pradollano y en los accesos. A las obras les ha pillado "meando" y está todo manga por hombro.
No hay sitio para aparcar, porque no han limpiado ni los accesos a las edificios ni a los aparcamientos.
Esta mañana, he salido a las 6 de la mañana, y todo estaba igual que ayer y además helado, incluida una espesa capa de hielo sobre el asfalto, sólo superable gracias a Subaru
En fin, lamentable.
¿Cuando se van a enterar los "catetos" de Monachil que cuando empieza a nevar, en los paises que no son referencia mundial como S. nevada, se pone todo Dios las pilas y dejan las ciudades sin un palmo de nieve en la calzada.Porque la nieve, en la montaña es una maravilla, pero en la ciudad, es un coñazo insoportable, y además un peligro.
Pues, nada. Como el que oye llover, o mejor dicho nevar..
¡Como caiga otra nevada de estas en el Puente de la Constitución, van a tener que sacar a la gente con helicópteros....!
Es lamentable, que una actuación humana, basada en la dejadez y en la prepotencia, oscurezca la felicidad de las primeras nieves que todos llevamos dentro.
Aunque lo comprendo. Estarán muy ocupados en el Ayuntamiento de Monachil calculando el próximo catastrazo, "afilando la grúa" y haciendólo las gorras a los guripas, ellos, tan flamentes, con sus talonarios de multas.
Paisssssss