El día del fin llegó, la Ratita presumida decidió que debía ser así en Sierra Nevada.
Nadie entiende que Terrón presumiera de uno de los cierres más tardíos desde que los socialistas se apoderaron de Sierra Nevada, y aparezca la Ratita, como salida del infierno a mandarnos al paro un mes antes a todos los que curramos.
Los socialistas son así, pues mantener tres remontes abiertos, daría lugar a tener que trabajar diez de los casi cien contratados del personal fijo, y claro que tendrían problemas y discusiones, como quién es el pringado que curra sentado en la casetilla del remonte.
Es difícil entender esta estructura de caos que es Cetursa, y de cómo se puede sostener. (Ej. el departamento de contabilidad lo llevan diez personas fijas) La explicación es real y existe como un sistemita en fermentación, pero la reparación no es posible sin destruirlo.
Ayer la Ratita se enfadó con migo, tuvieron que repetir la toma televisiva que tanto le gusta y prepara poniéndose guapa en el espejo del retrete. Yo solo quería salir detrás de ella para que me recordara cuando se viese, y tuviera consciencia de mi enojo, quiero que sepa que la vigilo como a cualquier enfermedad que pueda tener yo, y es una pena que no haya algún medicamento que la aniquile para evitar que pueda reproducirse y hacer más daño.
Sierra Nevada, el primer contacto.
La primera comunicación animal, instintos de supervivencia, la primera defensa del depredador, la mirada que mata, y mostrar los dientes con un gruñido que provocó temor en mí ante un posible mordisco, que casualmente evitaron los cámaras lanzandole un hueso como medida de distracción.
Al observar extraños sucesos posteriores decidí mientra la nieve llegaba al estado perfecto hacer meditación.
Me escondí como las monteses, para que no me viera la Ratita feroz, este insólito y misterioso depredador político.
Pasado el peligro de que me mordiera, continuamos nuestra misión.
Por la sierra estaban dispersos varios coroneles de naves estelares, habían decidido olvidar todo este dolor que la Ratita nos brindó a los esquiadores con una dedicación muy especial.
"Marchaos de aquí".
Debemos perdonarla, no tiene culpa de ser como es, es un ensayo corrosivo creado pos nosotros, reflejo de nuestra sociedad enferma, somos tan culpables como ella.
Volveré
