Cita
Dinosaurius-Park.
...
A ver ¡voluntarios para hacer de Jack Nicholson!
Yo me ofrezco. A estas alturas de cabreo y con mis pelos revueltos, la cara que se me está poniendo se le parece mucho, juas....
Estos nevadones tienen algo que me transporta a mi infancia.... Cuando camino y veo los montones de nieve, más altos que yo, me recuerda a la sensación que me daba antes cuando era chico, je...
(Hay que decir, juas, juas, que tampoco es que haya crecido mucho desde entonces

)
No obstante, creo que hace años, que nevaba igual o más que ahora, las calles estaban más limpias.... O quizás son trampas de la memoria, no sé.... De cualquier modo, os cuento una anécdota.
Cuando llegué a trabajar a Kirkwood, en California [
www.kirkwood.com] un lugar que ha batido récords de precipitaciones en el continente, lo primero que me dieron fue mi tarjeta de empleado para el parking (gratuita, juas, incluso para los inmigrantes semi-mejicanos como yo) junto con una pértiga de tres metros
Yo decía "Y esto... ¿Para qué?..." Al par de días supe bien para que era, y cuando me encontré mi Ford Bronco enterrado en la nieve, vi que delante del resto de los coches, salvo del mío, emergía cual periscopio la pértiga de rigor. Los maquinistas habían pasado diligentemente a unos escasos milímetros de cada palo, permitiendo así que cada uno tuviera que palear lo mínimo para sacar su coche. En el mío había una amable nota: "Por favor, usa la pértiga, nos facilitas el trabajo y podemos ayudarte mejor".
Una lección, creo, de compañerismo y de profesionalidad; de mentalidad de vivir en comunidad y de hacer bien el propio trabajo pensando en los demás.... Tomé nota, y nunca tuve un problema con mi coche en Kirkwood, como tampoco lo he tenido en otra decena de sitios donde he trabajado y donde siempre nieva infinitamente más que aquí, no teniendo, para colmo, tantísima pasta y recursos como hay en Sierra Nevada.
El otro día, en Sierra Nevada, un maquinista fue muy amable conmigo; hay muchos trabajadores haciendo bien su trabajo, incluso mejor de lo que las circunstancias les permiten. Pero lamentablemente esto no es la norma, sino la excepción. Creo que porque los Poderes Públicos reaccionan demasiado lenta y torpemente y porque nosotros, los ciudadanos, no sé si con razón o sin ella, no ayudamos lo suficiente. Deberíamos todos reflexionar y colaborar para que el trabajo rápido y eficaz sea la norma. Antes de que se produzcan males mayores.
¡Feliz semana!
Solo sé que Sócrates no sabía nada, o algo así era