Tuve la suerte de conocerlo yh tratar con él. Era de los que van quedando pocos.El pirineismo franco-español ha perdido un mito.
Como me decía el otro día un amigo y compañero de él, " los pirineistas " nos sentimos viudos. Ya Riglos no lo verá, ni Mont Rebei, ni todas las zonas por donde dejo sus huellas, pero eso sí " ha dejado un legado muy importante".
Amigo Bunny, ó Bony como lo llamaba yo, " Descansa en Paz ".
y la muerte de un buen tipo siempre es una triste noticia!!
