Han comenzado las labores de limpieza en las inmediaciones del alto tajo depués del devastador incendio del pasado verano que arrasaron mas de diez mil hectáreas y se llevó por delante la vida de 11 personas.
Hacia unos meses hablé con gente de la zona y me comentaban que la intención era meter las máquinas en el monte y llevarse todo por delante.
Afortunadamente doy fé de que no es así, están respetando los pinos y robles que parece que puedan salir adelante, incluso si en una hectárea hay un árbol sano lo respetan. Esperemos que esto continue así.
En zonas de mucho desnivel y en las que no se ha podido salvar nada han dispuesto los troncos haciendo terrazas para que la lluvia no arrastre toda la tierra.
Aquí unas fotos de una pequeña excursión por la zona. Comenzamos en Ciruelos del Pinar, el fuego apenas pudo pararse a 100 metros de las casas.
En las inmediaciones de Ciruelos del Pinar, hay bastantes pinos que han vuelto a brotar
El roble vuelve a buscar su sitio, esto se repite a lo largo de todo el camino
A medida que bajamos hacia Riba de Saelices (donde la famosa barbacoa) nos encontramos zonas más castigadas
Las labores de limpieza nos dejan esta imagen estremecedora, todos los troncos apilados, años y años de trabajo de la naturaleza perdidos en unos pocos dias, por suerte los pinos sanos son respetados.
Aqui imposible salvar nada
A medida que se llega a Riba de Saelices es más difícil ver algo de vida en los montes
Afortunadamente el fuego no llegó al alto tajo. Esperemos que todo esto sirva para que nos demos cuenta de una vez por todas que una colilla, una barbacoa o un vidrio en el campo puede costar tanto como once vidas humanas y convertir un paraje de inmensa belleza en un paisaje desértico.
Después de un día de calor apetece un bañito, Zeus no se lo piensa aquí en el puente de San Pedro