Buenos días amigos:
cuando Antoñín me propuso la ruta no pude resistirme a aceptar porque era conocer un rincón nuevo de Sierra Nevada. La idea era dejar el coche en la Cortichuela del Trevenque, y siguiendo la ruta Sulayr subir por la pista hasta el collado Chaquetas, bajar el rio Dilar cruzando el puente, ascender a la loma de Peñamadura hasta ganar altura y localizar una sendilla que a media ladera nos llevaría hasta casi las chorreras del Molinillo.
Cuando estabamos a unos dos mil metros sin querer estabamos a punto de cruzar un rebaño de cabras que pastaba por allí custodiado por tres MASTINES sin la presencia del pastor y nos pusieron en un grave aprieto pues debieron interpretar que ibamos a llevarnos alguna cabra, gracias a Dios que de repente apareció un joven pastor de otro rebaño, el cual conocía la conducta de los perros y nos dió las indicaciones oportunas para hacerles frente: "coged una piedra grande y si se os avanzan tiradle fuerte a la cabeza, que como caten las sangre estamos aviaos" Pues así lo hicimos sin darle la espalda a los perros y sin retroceder hasta que se calmaron y prosiguieron su camino con el rebaño. Le agradecimos su ayuda y continuamos nuestra ruta.
A la hora aproximadamente de seguir esta sendilla el rio Dilar que bajaba a nuestra izquierda nos obsequiaba con rincones de lo más bucólico, al ternando los pradillos con las cascadaca, sus cristalinas aguas con su murmullo nos calmaban la sed y animaba nuestro andar.
Una vez llegamos a las chorreras del Molinillo, paramos a descansar y a comer un bocado, nos refrescamos en el rio bajo la atenta mirada de algunos terneros que pastan por allí.
Ascendimos a la loma de Dilar por una veredilla a media ladera y una vez en lo alto siguiendo la loma nos conduciría de nuevo a la Cortichuela, buscando el Collado de Matas Verdes y la frecura de su bosque, como colofón de esta ruta.
En el trayecto invertimos 7 horas, empezamos a andar a las 10:00 y llegamos al coche a las 17:00 hora zulú, para aquel que lo quiera repetir, tenemos el track y no olvide llevar agua en cantidad ya que Don Lorenzo aprieta cada vez más.
Espero que os haya gustado, yo que nunca había pasado por ahí, os puedo decir que el valle del Rio Dilar es espectacular.
P.D. Dios bendiga a los pastores (menos al dueño de los perros)