Aprovechando que es puente, y mucha gente está ausente, haré unas reflexiones en público con la tranquilidad de producir, con ellas, el menos daño posible.
"Es dificil sentirse plenamente feliz en la vida si uno no sabe que es lo que puede hacerle sentir así".
A los montañeros, alpinistas, escaladores, esquiadores, etc., nos parece estar seguros de que lo que mas feliz nos hace en la vida es nuestra afición.
Es posible que en algunos casos eso sea cierto del todo, pero en otros puede que no.
¿Como saber si nos encontramos en un supuesto o en otro?
No resulta facil. Sabemos que en la escalada, por ejemplo, ante el miedo que nos da practicarla a determinado nivel de dificultad, somos capaces de concretarnos en una realidad, de inferior calibre (al menos para nosostros), pero que nos hace pensar que sacia la felicidad que deseamos. Solo cuando vemos a otros, haciendo lo que tememos, nos sentimos frustrados o espoleados por alcanzar un logro abandonado.
Imaginaos que se produzca el mismo fenómeno respecto a nuestro deseo de vivir la vida. Y que ante el miedo a vivirla en un determinado sentido nos estémos refugiando en una actividad que nos haga olvidar nuestro verdadero deseo.
El problema estará en que nuestro ser no olvida y vida solo hay una.