Tres grandes saltos
En las rondas clasificatorias Hatveit ya había dado muestras de lo que era capaz, pero fue en la gran final cuando se comió todo el pastel. Andreas (que se ha dejado una atractiva barba incipiente de dos días) la clavó en los tres saltos, hasta el extremo que en el tercer y último big air su rostro mostraba una amplía sonrisa, pues se sabía ya ganador. En la primera ronda final obtuvo la segunda mejor posición, por detrás del canadiense Phil Casabon, 283 por 281 puntos, para después pasar a ser el mejor en la segunda (286 puntos, el segundo en este salto fue el austríaco Patrick Hollaus) y en la tercera y definitiva tanda (281 puntos, por los 271 del norteamericano Sammy Carlson, segundo, y los 269 de Phil Casabon, tercero). Hatveit demostró que no sólo sabe saltar bien. Tambien sabe templar los nervios, no acelerarse y pensar en la competición.
Esta prueba se disputó en el histórico estadio olímpico de 1972, a -5ºC, sobre una rampa (los riders saltaban 25 metros de largo, volando seis metros sobre el kicker) que fue del agrado de todos los competidores, y no es para menos pues fue obra del reputado shaper David Ny, responsable también del pipe olímpico de Turín en 2005 y del de Salt Lake City de 2002. Estuvo más de media semana antes trabajando para que la rampa estuviera en perfectas condiciones, y los riders de lo agradecieron con un gran espectáculo en el Arena Stockholm.
Clasificación final
1.- Andreas Hatveit (NOR), 281/286/281: 286 puntos
2.- Phil Casabon (CAN), 283/224/269: 283 puntos
3.- Sammy Carlson (USA), 280/105/27: 280 puntos
4.- Pekka Hyysalo (FIN), 272/30/45: 272 puntos
5.- Jon Olsson (SWE), 270/30/15: 270 puntos