Unas marmotas se instalan en una pista de esquí

Y no es que a los respnsables de la estación de esquí de Leogang, de repente les haya dado por la zoología, sino que está colonia de 45 simpáticos animalitos han montado su madriguera junto a los cables de un remonte. Según responsables de la estación, si se les ocurre morder algún cable, el único perjudicado será la marmota que haya pinchado el cable, ya que el remonte dispone de un servicio de energía de emergencia que le permitiría funcionar hasta que todos los esquiadores se bajaran.

Las marmotas son unas criaturas muy versátiles, que tienen pocos problemas para ocupar zonas pobladas. "Ellos no tienen enemigos, simplemente se adaptan", afirman desde la estacion de Leogang, que se encuentran sin saber que hacer para evitar que muerdan algún cable. A las marmotas les encanta la hierba, el grano y los insectos que se encuentran en las zonas montañosas de alturas entre 800 y 3.200 metros del centro y sur de Europa. Pesan entre 4 y 8 kilos y llegan a medir cola incluida, unos 70 centímetros.

A pesar de vivir en mitad de la pista, los animales no están en peligro, ya que en invierno hibernan, pero es en primavera, con las últimas nieves derritiendose, cuando se teme que algún esquiador le rebane la cabeza.