Valgrande ultima las obras de mejora con las que afrontará, a partir de noviembre, una nueva temporada de esquí. El Principado, titular de las instalaciones, ha invertido en los últimos meses 420.700 euros que han permitido acondicionar pistas, instalar nuevos paravientos y cambiar la ubicación de cuatro cañones, medidas que permitirán alargar la presencia de la nieve en los descensos del Brañillín. Se trata de un paso más en un plan de mejoras que arrancó hace dos años con la implantación de la nieve artificial
La estación de esquí de Valgrande-Pajares ha dedicado los meses de verano a mejorar sus instalaciones con citas a la próxima temporada, con una inversión aproximada de 420.700 euros. Los operarios del único complejo invernal asturiano ultiman estos días el acondicionamiento de pistas, la colocación de paravientos y la reubicación de algunos cañones de innivación, medidas todas ellas orientadas a garantizar una mayor permanencia de la nieve en los principales descensos del Brañillín. El fin de estas actuaciones es mejorar los resultados del pasado año, cuando la dirección del complejo deportivo contabilizó 160.000 visitantes, de ellos 45.000 esquiadores.
Los movimientos de tierra han permitido mejorar varias pistas del complejo invernal. La actuación de mayor envergadura se ha ejecutado en el Valle del Sol, una de las principales arterias de la instalación deportiva. Se ha acondicionado, en concreto, la parte alta del nuevo descenso que se habilitó a finales del pasado invierno con la inauguración del nuevo telesilla del Valle del Sol, el segundo cuatriplaza del Brañillín e inversión estrella de la temporada.
Por otra parte, y según explicó el director de la estación, José Miguel Vega, se ha prestado una especial atención a la colocación de
La dirección de Valgrande también ha estudiado la rentabilidad de los 49 cañones de nieve con que cuenta el Brañillín y ha decidido cambiar de ubicación cuatro de ellos. Ya han culminado las obras para abrir en la pista de La Hoya las cuatro arquetas a las que se conectarán los cañones. De este modo quedará asegurada la innivación artificial en una zona de mucho desgaste por la que es imprescindible descender para acceder a algunos de los principales remontes.
El sistema de innivación ha sido una de los principales objetivos del Principado, titular de Valgrande-Pajares, en las dos últimas temporadas. La apuesta por las instalaciones regionales del Brañillín arrancó con una inversión de 1,5 millones de euros que permitió, entre otras actuaciones, colocar los primeros cañones, hace dos temporadas. El pasado año, y gracias a una inversión de tres millones de euros del plan complementario para la reactivación de las Cuencas, se amplió la superficie beneficiada por la nieve artificial, se efectuaron numerosas mejoras en pistas y se inauguró, casi al final de la temporada 2002-2003, un moderno telesilla cuatriplaza en el Valle del Sol. Otra de las inversiones incluida en aquel paquete, la reforma integral del albergue Toribión de Llanos, está aún en ejecución.
El propósito de los responsables de Valgrande-Pajares es convertir la estación lenense en un referente deportivo. Las campañas de promoción se han extendido últimamente a otras regiones limítrofes para captar deportistas más allá de Asturias y León.
Mapa de Valgrande-Pajares extraído de la web, www.valgrande-pajares.net
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