Dicen los que alguna vez han bajado el
corredor del Veleta con esquis que es bueno subirlo antes para saber exactamente a que te
expones en la bajada y conocer el
itinerario.
Asi que el pasado domingo 31 de Mayo, allá que nos fuimos Pepe Peinado y servidor, de la mano de dos excelentes guías y montañeros,
Rai y F. Wilhelmi.
Hubo que salir bien
temprano para no encontrarnos la nieve demasiado blanda y exponernos lo menos posible a los
desprendimientos de piedras y nieve, algo bastante frecuente en las verticales paredes de la cara norte del Veleta. A las
7 de la mañana ya estábamos camino de nuestro objetivo.
Tras una marcha de aproximadamente hora y media, y tras cruzar
numerosos neveros (quien lo diría siendo casi junio) llegamos a las
Posiciones. Aqui ya empieza lo bueno. Desde este punto se ve claramente el itinerario a seguir.
Sacamos los
crampones, piolets, arnes, casco y demás elementos de seguridad, y comenzamos la aventura haciendo un pequeño descenso hasta donde comienza el
Veredón.
La nieve ha pesar de estar blanda tiene
cierta consistencia y permite avanzar con
seguridad y sin demasiado esfuerzo.
Fernando va abriendo huella y Rai cerrando el grupo. Además de hacer de guías les hemos endosado el papel de fotógrafos. Asi da gusto hacer montaña...
Tras una
agradable travesía en silencio para escuchar las posibles caídas de bloques, nos vamos aproximando al
canuto o corredor propiamente dicho. La pendiente comienza a acentuarse y con ella la dificultad.
Hay que ir con
mucha atención, dando
pasos pequeños y firmes, y observando muy bien el terreno.
En algunas zonas la nieve estaba
excesivamente blanda y avanzar era mas difícil, te hundías o simplemente no encontrabas firme donde apoyar los pies.
La primera parte del canuto es bastante
estrecha y pendiente, pero poco a poco se va abriendo y conforme te acercas al final la
dificultad disminuye, algo que viene muy bien porque el
cansancio tambien va en aumento.
A la vez que disfrutamos la subida, vamos
dibujando en nuestra mente la
futura bajada con esquís. Hay amplitud de sobra para bajar cómodamente, la pendiente es fuerte pero no imposible, pero una caída podría resultar fatal...
En los metros finales, aunque pega el solecito, el viento corre con algo de fuerza y el frío aprieta. En la cara se nos empieza a dibujar una
enorme sonrisa. Casi hemos llegado...
Fernan no puede evitar hacer el cabra, a él esto le ha parecido poco...
Hemos subido el corredor, pero aun la aventura no ha terminado. Ahora tocar
escalar la "Fidel Fierro" hasta la cumbre del Veleta.
Nos quitamos los "hierros", comemos algo rápido, y tras disfrutar un rato de las
impresionantes vistas, comenzamos la escalada.
En realidad esta vía es fácil, pero siendo la primera vez que la hacemos, y teniendo en cuanta el cansancio acumulado, Pepe y yo
preferimos encordarnos.
Finalmente llegamos a la cumbre,
muy satisfechos, y habiendo disfrutado enormemente de la actividad y de la compañía.
La segunda entrega de este artículo llegará el próximo invierno, cuando bajemos el corredor
con esquís, pero habrá que esperar hasta entonces...
Gracias Fernando y Rai por habernos acompañado y guiado en esta aventura.