- La mallorquina debutó en los Juegos Olímpcios de Vancouver
- "Cometí un error y me fui de la carrera", afirma la esquiadora
- "Ahora mismo estoy hecha polvo, he cometido un error técnico que me ha costado la eliminación"
La esquiadora malloquina Úrsula Pueyo fue eliminada en su debut en los Juegos Olímpicos de Vancouver, en la primera manga de la prueba del eslalon para discapacitados físicos. Pueyo, abanderada española en la ceremonia de inauguración, cometió un error en la primera parte de la bajada y se cayó en la segunda puerta del muro. Entonces, se levantó e intentó continuar la prueba, pero su esquí se deslizó y se saltó otra puerta, por lo que decidió no continuar y fue eliminada.
"Ahora mismo estoy hecha polvo, he cometido un error técnico que me ha costado la eliminación", comentaba Úrsula nada más terminar la prueba. "No estaba nerviosa, y había estado entrenando muy bien estos días. Qué se le va a hacer".
Los nervios y su lesión en el hombro. Úrsula no cree que le hayan pasado factura los nervios de todo debutante. "Sería mentirte si te digo que sí. No me he puesto nerviosa ni nada. Simplemente he fallado y ya está, he esquiado mal y ya está. No hay más", reconoce. La mallorquina no ha querido achacar su caída a sus problemas con el hombro derecho, que la obligaron a llevarlo vendado: "No me he caído por el hombro ni nada, me he caído por mi propio error. Lo único es que esta tarde me lo trataré un poco más", indicó.
El entrenador de la esquiadora de Esporles, Andrés Gómez, comentó la carrera de su pupila: "Ha sido una lástima su caída. Llevaba buen ritmo de carrera, pero se ha enganchado con una puerta y ha caído. Es algo lógico, porque era la primera vez que corría en unos Juegos Olímpicos, en donde hay mucha presión".
A pesar del varapalo, la mallorquina no estaba disgustada. "No estoy enfadada. Lo que siempre quiero es hacerlo bien, lo que me sabe mal es no hacerlo bien. Cabreada no, ¿para qué? Tengo dos trabajos si me cabreo. Por eso no me cabreo nunca", comenta.
"Me sabe mal, no te diré que no. No es que me sepa mal porque sea ésto, sino que me sabe mal porque lo he hecho mal. Porque a mí me da igual que sean unos Juegos o que sea el campeonato de mi pueblo. Lo he hecho mal y punto", añade.
Pueyo explicó que el trazado era "muy bonito" por lo que esperaba haber "disfrutado más". "Las primeras puertas giraban un poco, luego recto, estaba muy bien. Ha sido en el muro. En el muro había mucha distancia y cerraban poco, pero tenías que dejar correr el esquí. Igual me he cruzado un poco y me he caído. Y ya cuando me he levantado, porque enseguida me he levantado, el esquí ya me ha empotrado contra la otra puerta y ya he decidido no seguir, para no hacer cuatro minutos", concluyó.
Por otra parte, la canadiense Lauren Woolstencroft cumplió con el guión y fue la más rápida de la primera bajada con un registro de 56.18 con una renta de 2.84 segundos sobre la eslovaca Petra Smarzova, segunda, y de 3.47 sobre la alemana Andrea Rothfuss, tercera.
Una nueva oportunidad este miércoles en el Eslalon Gigante
La esquiadora de Esporles tendrá una nueva oportunidad en el Eslalon Gigante del próximo miércoles para conseguir un buen resultado. "Será lo que Dios quiera, pero yo arriesgaré, iré a por todas y lo daré todo por ganar".
La deportista balear, que comenzó a esquiar en 2004, llega a Vancouver con la intención de acabar entre primeras posiciones y avalada por las cuatro medallas -tres platas y un bronce-- que consiguió el pasado año en la I Copa Paralímpica del Mundo de invierno.
Mañana, en la tercera jornada de competición de esquí alpino, y la quinta de los Juegos, la participación española se centra en la prueba de gigante, para deficiente visuales, con Jon Santacana, Anna Cohí, Andrés Boira y Gabriel Gorce.
El esquí alpino con participación nacional tiene las competiciones de eslalon, eslalon gigante, súper gigante, súper combinada (prueba que consta de dos mangas, eslalon y gigante) y descenso.