El invierno ha querido pegar el último coletazo antes de irse definitivamente en plena primavera. Mientras una nevada trastocaba ligeramente los planes de Macron y Xi Jinping en Grand Tourmalet, en Andorra la nieve se hacía todavía más notable en el norte del país, donde en localidades como el Pas de la Casa incluso se tuvo que circular con cadenas o neumáticos de invierno.
La recomendación de equipamientos especiales para circular se hacía desde Soldeu, aunque la nieve ya hacía acto de presencia desde más abajo, en Canillo. A partir del Pas de la Casa, ya entrando en Francia la situación se volvía más complicada por el incremento de la intensidad de la nevada, pero especialmente también por la diferencia de conservación de esa carretera en el lado francés.
La cota de nieve llegó a bajar hasta los 1700 metros, dejando hasta 11 centímetros de nieve, según informa el Servei de Meteorología d'Andorra, que se esperan que vayan desapareciendo rápidamente a lo largo de este miércoles a medida que se vaya imponiendo el sol y suban las temperaturas.