Este año además era especial ya que Cristina y yo nos casamos esa misma semana. De locos!!,
Dos días después de la Kedada nos embarcamos en un vuelo de Easyjet directo a Ginebra. Tras descartar la opción arriesgada de Dolomitas en estas fechas, nos dejamos aconsejar por Nacho (Alpeski) para conocer de una vez por todas Tignes y su dominio Espace Killy.
Decidimos llevarnos los esquís y las botas facturadas lo que nos supuso pagar 250 euros (por persona) por el vuelo directo desde Malaga (ida y vuelta).
Llegamos a Ginebra a las 18.15, un vuelo directo de dos horas y media desde la Costa del Sol al corazón de los Alpes. Todo funcionó como un reloj suizo y nuestros queridos esquís aparecieron en la cinta 9 del aeropuerto de destino. Primera fase superada!!
Recogimos un coche de alquiler en el mostrador de Sixt, enchufamos el GPS y salimos camino de los Alpes Franceses. Un trayecto cómodo en excelente autopista de peaje (unos 20 euros por trayecto).
Una premonitoria nevada de abril nos acompañó durante las 2,5 horas que duró el trayecto hasta Tignes 1800.
Sobre las 22.00 llegamos a nuestro alojamiento, el Chalet Monte Bianco, el que sería nuestro centro de operaciones durante nuestra estancia en Tignes.
El estratégico alojamiento
Para un viaje en pareja nos planteamos una serie de necesidades a la hora de elegir el alojamiento:- Salir y llegar esquiando
- Alejado de las zonas más concurridas del dominio
- Bien comunicado
- De pequeño tamaño y acogedor
- Media pensión incluida (desayuno y cena)
Levantarnos y tener un desayuno francés preparado es todo un lujo. Al igual que al vover de esquiar, un verdadero chef nos preparaba cada noche una excelente cena con productos locales regada con buen vino. .
Recorriendo el dominio Espace Killy de una punta a otra
Aunque estemos en un pequeño pueblo de 4 o 5 casas, tenemos a nuestra disposición 300 kilómetros de pistas con un solo forfait, uno de esos lujos que encuentras en la Saboya.El dominio es alargado y se divide a su vez en dos estaciones: Tignes (donde nos alojamos nosotros) y Val d'Isere.
Arrancamos subiendo al telecabina Les Boises que tenemos a unos metros del alojamiento, un buen remonte para iniciar el recorrido mañanero, el canto de los pájaros del valle nos acompaña en la subida...
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Vaya vistas....
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El ojo que nos vigila en las cabinas, cuidadín
Dejamos la cabina y nos subimos a un nuevo telesilla, el Aguille Rouge que ya nos empieza a enseñar la grandeza del dominio esquiable al que nos enfrentamos.
Y desde la estación de llegada del telesilla ya divisamos Tignes 2100 - Le Lac, el verdadero centro neurálgico de Tignes y por donde debemos cruzar para seguir avanzando por el dominio..
Mola llegar a un pueblo esquiando
Para seguir avanzando, nos montamos en el estupendo telecabina Tovière, mientras subimos podemos ver a la derecha Val Claret, separado de Tignes por un inmenso lago helado.
Excelentes vistas y buena perspectiva desde la llegada del telecabina.
Desde allí una agradable bajada entre verdes y azules por el Col de Fresse, una zona amplia repleta de snowparks y que delimita los dominios de Tignes y Val d'Isere. Aquí unas vistas subidos al TS Marmottes.
En la pista una carrera bien montada.
Buen ambiente de competición a la salida de la carrera.
Y aquí en la cima de Bellevarde, donde se dividen los dos dominios de Tignes y Val d'Isere.
Desde la cima ya podemos ver la base de Val d'Isere.
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Y desde allí un delicioso descenso pasando por la pista de Santons, que finaliza en un larguísimo desfiladero estrecho muy entretenido, una de las pistas más divertidas de todo el dominio sin lugar a dudas.
Val d'Isere es un centro residencial enorme, aunque únicamente dispone de dos estupendos telecabinas para salir del valle hacia sus dominios esquiables.
Para seguir avanzando en el dominio cogemos el excelente telecabina Solaise, que nos eleva a 2560 metros.
Aquí el desfiladero (pista Santons) que acabábamos de bajar visto desde el telecabina.
Desde allí nos dirigimos por pistas rojas hasta el telesilla Pyramides
Unas vistas a Les Grands Vallons, donde algunos intrépidos (con guía) se adentraban fuera de los limites de la estación.
Y por fin llegamos al extremo sur del dominio Espace Killy, con su Glaciar de Pissaillas, un enorme patio de juegos para freeriders repleto de canutillos y lomas suaves que dan a parar a una percha estratégicamente colocada.
A pesar del aspecto jugoso de las fotos, debo decir que la capa de nieve suelta no era lo suficientemente gruesa y había que ir con bastante cuidado y buscando ventisqueros para disfrutar de un "powder" suave y profundo.
Estuvimos en Pissaillas un buen rato disfrutando aunque es importante llegar temprano y comenzar la vuelta a casa sobre las 14.30-15.00 como muy tarde ya que se tarda un buen rato en volver a la zona de Tignes 1800 desde allí y como te cierren el acceso entre Tignes y Val d'Isere, tendrías que volver por carretera y pagando un buen dinero por un transfer. ¡No te despistes!
En tres horas esquiando con tranquilidad llegas de un extremo a otro del dominio, es decir que el Espace Killy se puede recorrer en un solo día de esquí, aunque por supuesto quedan muchas zonas por ir descubriendo y otras en las que te puedes quedar un día entero disfrutando.
Las zonas bajas Tignes 1550, La Daille, Le Laisinant y Le Fornet
A los que solemos esquiar en estaciones altas, nos encanta esquiar entre bosques, Tignes dispone de algunas zonas bajas donde poder disfrutar de una buena bajada en mitad del bosque. Son zonas ideales cuando la meteo se complica y se pierde visibilidad en las zonas altas.Bajar hasta Tignes 1550 es una delicia, una paseo por una pista-carretera rodeada de árboles y sonidos del bosque, no dejes de visitarla.
En la zona más pegada a Tignes dispones de zonas de árboles en La Daille con estupendas pistas rojas abiertas y rodeadas de bosque, la nieve quí está más transformada aunque yo incluso la prefiero así, más "blandita"
Interesantes edificaciones en La Daille.
Otra zona de bosque y potente es el valle que cae a Le Laisinant, con una estupenda pista roja entre bosques que acaba en la base del telesilla Laisinant.
No pudimos bajar por el tubo de la Pista L por problemas de aludes
En Val d'Isere, la zona baja de Le Fornet está llena de bosque y caminos por los que ir bajando hacia el valle donde nos espera un enorme teleférico
La Grande Motte. Punto y aparte
Dejamos el glaciar de Tignes para el último día, con nieve recién caída y un lunes al sol de esos que no te esperasPara mi gusto, la zona más espectacular y potente de todo el Espace Killy, sin la Grande Motte el dominio quedaría incompleto.
Desde la zona de Val Claret se accede o bien mediante el TS Les Lanches o usando el funicular Perce Neige
La zona está repleta colosos de piedra.
Desde mediados de marzo el teleférico que sube hasta la cumbre de La Grande Motte está estropeado. Por lo visto estuvo castigado por vientos de más de 200kms/h el 11 de marzo de 2019
Pero realmente nos dió un poco igual, el entorno es sencillamente ESPECTACULAR.
Pistas de todos los tipos y colores, amplias y con la mejor nieve del dominio, al menos hoy!!
Un restaurante chic a más de 3000 metros de altura
Con San Bernardo incorporado.
En resumen, la zona de La Grande Motte es un espacio de esquí cojonudo para dedicarle un día entero y no te cansas. Un entorno espectacular con la mejor nieve del dominio. Eso sí, necesitas un día con sol y poco viento.
Aiguille Percée, telesillas lentos y paisajes de película
Otra de las zonas que más nos gústó fue el dominio que rodea (a un lado y a otro) la cima del Aiguille Percée.Sus telesillas son tranquilos, como si quisieran que disfrutáramos de un paisaje repleto de formaciones caprichosas
Es imposible representar con fotos o con palabras la sensación que tienes rodeado de toda esta inmensidad
En resumen
Lo que más nos gustó:
- El alojamiento y su ubicación estratégica
- La Grande Motte y el Aiguille Percée
- Excelentes pistas azules y verdes. Todo perfectamente señalizado para no perdernos
- Los telecabinas de lujo
- Sistema impecable de control de accesos electrónico
- Personal amable y profesional en pistas y remontes
- Transporte grauito con Navettes por la estación
Lo que menos nos gustó:
- Complicados y confusos accesos a algunas zonas del dominio. Sí, nos tocó remar en ocasiones
- Baños de algunos bares cobran por uso
- Pocos ambiente local en pistas
Pepe
BONUS VÍDEOS
Todos los días solíamos parar sobre las 14:00 a repostar en este cómodo y agradable bar de carreteraOtro de los grandes placeres de estas estaciones es poder llegar a la puerta del alojamiento con los esquís puestos.