Según informaron hoy fuentes de Cetursa, empresa que gestiona este espacio invernal, la gente se desplazó hasta los 17 kilómetros de pistas que se habilitaron a pesar de las malas condiciones metereológicas que han marcado la jornada con nevadas, fuerte viento y escasa visibilidad.
Asimismo, debido a los estragos ocasionados por el viento, se han realizado trabajos de acondicionamiento en los remontes, de forma que las pistas se han abierto de forma paulatina hasta llegar a un máximo de 17 kilómetros esquiables. Además, en la carretera de acceso a Sierra Nevada ha sido necesario el uso de cadenas desde el kilómetro 22 en ambos sentidos.
Uno de los principales efectos del viento y las bajas temperaturas del sábado fue que se formaran "manguitos" de hielo en los cables de los remontes, lo que inhabilitó por completo el funcionamiento de estos. Así, la tarea de volver a ponerlos en marcha fue especialmente "difícil" porque se realiza manualmente a temperaturas extremas.
En cuanto a la previsión del tiempo para el lunes, la Agencia Española de Meteorología (Aemet) prevé cielos nubosos con posibilidad de nevadas y unas temperaturas que en Pradollano oscilarán entre -6 y -9 grados centígrados mientras que en Borreguiles oscilarán entre los -9 y los -12 de máxima.