-Podemos hacer varias lecturas. Primero de respeto, como no podía ser de otra forma, a los tribunales de Justicia, compartamos o no los motivos. Después, hay dos puntos de vista. En un primer lugar, tanto el Ayuntamiento de Tordesillas como Sodeva y la Diputación están buscando alternativas para el mundo rural, como es esta pista de esquí, siempre con todos los permisos y certificaciones, por lo que no nos parece correcta esta paralización. Lo que sí está claro es que la Ley de Montes está pensada para evitar la especulación, y este proyecto no es especulativo, sino de interés público y de regeneración de las zonas rurales. Lo que no entendemos es que los ecologistas quieran echar para atrás y torpedear un proyecto como éste.
-¿Qué consecuencias puede tener la paralización?-Los ecologistas no se dan cuenta, pero acaban de dejar sin trabajo a 30 familias que mañana, cuando lean los titulares, van a ver truncadas sus esperanzas de poder trabajar en el medio rural y quedarse a vivir en su pueblo con sus familias. Es un poco lamentable que estemos trabajando desde el gobierno por crear trabajo, riqueza y un bienestar económico y que haya gente, sin que se sepan bien los objetivos que persiguen, que nos pongan zancadillas. Este proyecto estaba creando unas sinergías sociales muy beneficiosas para la zona al haber gente interesada en crear un negocio periférico a la pista e iniciativas privadas que ya se habían puesto en contacto con nosotros, como restaurantes, bares o casas rurales en los alrededores, y que ahora se van a quedar fuera por algo que no tiene ningún sentido. De todos modos debemos ser prudentes hasta que salga la sentencia definitiva.
-¿Va a tomar la Diputación alguna medida al respecto?
-Vamos a ponernos a disposición del Ayuntamiento de Tordesillas para las alegaciones al auto. En definitiva, brindar toda la ayuda que sea posible.
