Se llama Asataroh Akiba y no solo su nombre parece también que se tenga que leer al revés, sino que afirma que siempre ha bajado de esta manera. El hombre, ataviado con un bastones a los que ha atado una especie de serpentinas y equipado con unos esquís adaptador para ir al revés, afirma ser el pionero de esta técnica a la que ha bautizado como "Backward Ski".
No contento con eso, ha hecho de esta forma de descender las pistas un complemento que le sirve para viajar a algunas de las mejores estaciones de los Alpes, a donde le invitan habitualmente. Se le ha podido ver en Murren (Suiza) o en los glaciares austriacos de Pitzal y Stubai en verano e incluso en Nueva Zelanda.