La carrera se hace por segundo año consecutivo, tras el enorme éxito de la primera, en el que acudió casi 10.000 personas, que han sido superado ampliamente en este 2010. El éxito económico de la convocatoria está asegurado, y el público ha llenado cervecerías, ha comido bratswurts y ha llenado las arcas de los empresarios de la ciudad.
Los participantes deben lleva como único atuendo, unos guantes, botas y un casco que les proteja de alguna caida. El ganador de este año ha sido un joven de 20 años, Christian Schmidt, natural de la Alta Sajonia. Entre los partipantes había tres espectaculares mujeres, que las malas lenguas dicen que estaban 'subvencionadas'. El año que viene, ya han anunciado que repiten!