Es muy probable que haya mucha nieve en las pistas de esquí. Es de esperar, también, que los alojamientos de todo el país hayan mejorado sus servicios y capacidades. Sin embargo, la gran incógnita es la actitud de los argentinos en su faceta de turistas invernales. Los precios subieron, los cortes de rutas han hecho peligrar el normal abastecimiento de las ciudades, falta combustible y el consumo se retrae. La incertidumbre es el escenario que se presenta frente a estas vacaciones de invierno. "Los turistas toman sus precauciones. Habrá que ver qué pasa y si se soluciona el conflicto con el campo. De todas formas, lo fuerte empieza el 5 de julio, en coincidencia con las vacaciones de Brasil. Esperamos que sea una temporada razonablemente buena", dice Juan Carlos Begué, presidente de la Cámara de Centros de Esquí. En general, los operadores turísticos son muy cautos al hablar de las expectativas, incluso hay quienes auguran un fracaso. Desde la Asociación de Agencias de Viajes y Turismo reconocen que hay una retracción importante en las consultas y que hay muchos menos pedidos de información que para el invierno pasado. Sin embargo, el pesimismo no forma parte del discurso de los centros de esquí. Será porque tratan con otro tipo de público, incluso extranjero. Begué calcula que si se distienden los ánimos, la temporada será similar a la del año pasado, que fue muy buena.
Efectos colaterales
También Diego Llorente, del Cerro Catedral de Bariloche, es optimista. "La semana que viene ya abrimos las pistas para los esquiadores. En 2007 fue récord la cantidad de personas: 12.000 por día durante tres semanas. Esperamos, al menos, mantener ese nivel de convocatoria y que acompañen las nevadas". De todos modos, los centros de esquí no están exentos de problemas. La zona de los lagos del Sur (Chubut, Río Negro y Neuquén) vive en jaque por el volcán Chaitén y sus cenizas. Esos lugares vienen de cuatro buenas temporadas invernales. El cerro más afectado puede llegar a ser La Hoya, en Esquel: si hay cenizas se suspenden los vuelos. Desde Bariloche dicen que las posibles erupciones del volcán son más preocupantes que el conflicto con el campo, pero esperan que se solucione porque, de hecho, las compañías aéreas ya regularizaron sus servicios.
¿Qué pasó con los precios? Desde la Cámara de Centros de Esquí afirman que los aumentos "acompañaron la inflación real, y están entre un 15 y un 20% por arriba de la temporada 2007". Eso abarca los pases diarios, las escuelas de esquí y el alquiler de los equipos. En el Cerro Catedral, las subidas en los forfaits son del 24%: el pase diario que el año pasado costaba $125, este año está a $155 por persona.