Como bien dice el título tengo un buen dilema en la cabeza, o en este caso los pies.
Gasto un 44 (28,5). Después de probarme unas botas en una tienda(el viejo truco), y viendo que las que me quedan bien son el 29, decido comprarlas en la web, que al ser un modelo del año pasado me ahorro bastante-Dynafit Zzero 4-.
El caso es que probandolas en casa veo que el pie me baila bastante dentro del botín, y dicho sea de paso hasta se producen arrugas en el mismo(botín), y ya con la carcasa puesta veo que tengo que apretarla al máximo para que ajuste bien.
Ni que decir tiene que tengo el pie estrecho. El caso es que las cambio(pagando portes claro está), y pido unas del 28,5. Y ahora sí, el botín me queda perfecto, pero la carcasa...veo que me aprieta bastante delante y noto mis dedos gordos muy en contacto ahora sí con el botín/carcasa, lo que no sé si me producirá las famosa uñas negras.
Me las he puesto un par de días en casa a diferentes horas y parece que ya me van mejor pero no me fío.
Y en esas estoy, si elegir las 29, que me bailan=rozaduras, o las 28,5=posibles uñas negras. Claro está que quizas la solución sería, botín del 28,5 y carcasa del 29, pero tampoco es plan de comprar dos botas
Y he ahí mi dilema....por si alguien quiere opinar