En primer lugar se plantearon crear una línea de ropa que cumpliese con sus exigencias. Ropa que combinara simplicidad con funcionalidad, con un diseño atractivo, no excesivamente llamativa pero tampoco aburrida.
En segundo lugar, se preguntaban qué podían hacer para pasar más tiempo en la estación de esquí que tanto amaban, Åre, el pequeño pueblo de montaña ubicado en el corazón de las montañas de Suecia.
La respuesta a estas dos preguntas fue Peak Performance
Peak Performance es el proyecto de tres esquiadores que se unieron en 1986 para dar vida a su sueño: crear prendas de esquí de alta gama combinando funcionalidad y diseño simple pero atractivo. El esquiador de élite Stefan Engström, el editor jefe de una revista nórdica de esquí Perter Blom y el director de arte y diseño Christer Mårtensson, fueron los fundadores de la firma situada en Åre (Suecia) a la que se unió más adelante el ex esquiador alpino Jonas Ottosson. En una época, finales de 1980, en la que el equipamiento de esquí destacaba por la extravagancia y la superficialidad de las prendas, Peak Performance se convirtió en la mejor alternativa en las pistas de esquí.
Desde los inicios, nos hemos dedicado a hacer, mediante técnicas avanzadas, ropa para las diferentes estaciones del año. Nuestras prendas siempre son de una altísima calidad y nuestra fuente de inspiración es la montaña.
25 años más tarde, la filosofía de la empresa prácticamente no ha variado ya que continuamos trabajando con el mismo espíritu que tenían los fundadores; hacer productos de los que nos sintamos orgullosos.
Peak Performance es la mayor marca de moda deportiva en Escandinavia.
Actualmente opera en más de 20 mercados y dispone de un total de 83 General Stores (tiendas de la marca) y 7 outlets.
Además vende sus productos en 2000 tiendas exclusivas y a través del e-commerce. Las General Stores están estratégicamente situadas en lugares como Estocolmo, Chamonix, Kitzbühel, Andorra, St. Moritz, Zermatt o Vancouver, entre otros.
Actualmente trabajan 83 personas en la sede Peak Performance ubicada en Estocolmo, Suecia, mientras que en las filiales del resto del mundo trabajan 47 empleados. Las General Stores dan trabajo a 261 personas.
Por último quedarían los países en los que Peak está presente a través de distribuidores nacionales.
Ser aventureros nos da la oportunidad de inspirar a la gente para que se dejen guiar por sus corazones y sus pasiones, para que descubran nuevos lugares, nuevos aspectos de la vida hasta el momento desconocidos y para que exploren el lado aventurero de su personalidad. Inspiramos a la gente para que disfruten de la vida y apoyamos todas las decisiones que mueven a la persona a dar un paso hacia delante.
1986-1990
Si viajásemos a través del túnel del tiempo hasta 1986, veríamos como la canción “We are the world” gana todos los premios Grammy. La Argentina de Diego Maradona gana el Mundial de México. Boris Becker gana a Ivan Lendl en la final de Wimbledon. Este mismo año Nintendo lanza su primera consola.
Al mismo tiempo, una pequeña estación de deportes de invierno sueco experimenta un auge que la hace sentir como una supernova. 1986 fue el año en que todo sucedió en Åre.
Todo el mundo estaba allí, y cuando decimos todo el mundo significa todo el mundo. Algunos probablemente no sabían por qué, pero sin saberlo estaban allí. Fue en el invierno de 1986 cuando nació Peak Performance, de la mano de un grupo de esquiadores indomables recién llegados de Sun Valley, Idaho.
Cualquiera que haya visitado Åre sabe que hay más retos que simplemente conquistar las pistas. Åre es un lugar increíble, pero el tiempo es totalmente impredecible. Exige paciencia, tenacidad y una verdadera pasión por el esquí para soportar el frío, la oscuridad y, a veces, la falta de nieve.
Desde el principio nuestro negocio se centró en lo que considerábamos más importante: encontrar el diseño adecuado pero sin olvidar la tecnicidad de las prendas. Y esta estrategia funcionó por lo que la hemos mantenido hasta el día de hoy. Se superaron todas las expectativas. Los primeros pedidos por correo colapsaron la pequeña oficina de correos de la ciudad por lo que tuvieron que contratar más personal para poder atender la demanda. Durante los primeros años, todo funcionaba más lento de lo normal. Después de todo, Peak Performance es una empresa fundada por los esquiadores - gente que en invierno querían esquiar por encima de todo. El hombre y la naturaleza en perfecta armonía. Había días en los que en la oficina de Åre se podía observar un cartel que decía “Estamos esquiando”. Y es que muchas de sus ideas les venían a la cabeza cuando se encontraban en lo alto de la montaña. Durante las noches diseñábamos nuevas prendas, trabajábamos en los nuevos catálogos y preparábamos los pedidos. Fue un inicio emocionante y todavía quedaba mucho por llegar.
1991-1995
Åre, en la provincia sueca de Jämtland. Åre sólo hay uno, sin embargo podemos encontrar muchos lugares como éste, por ejemplo Cortina, Chamonix, Vail, Aspen, Verbier, Zermatt y St Moritz.
Todas las estaciones de esquí tienen el mismo sentimiento de exclusividad y tradición que Åre. Todas ellas tienen algo en común, la misma pasión ferviente y los mismos valores; propios de una gran estación de esquí. Nuestro objetivo era entrar en esas tiendas situadas en los centros históricos de esos lugares ya que eran muy exclusivos. No fue trabajo fácil. Esas tiendas iban pasando de generación en generación y se mantenían fieles a su larga historia por lo que era complicado que aceptasen una marca joven, sueca, que diseñaba chaquetas elegantes.
Podríamos decir que Peak se quedó sola en una pista oscura y llena de obstáculos. El reto perfecto, de los que nos gustan a nosotros. Después de que algunos peces gordos locales fueran a esquiar con nuestro director financiero, las cosas empezaron a cambiar. No se habían dado cuenta que éste era un excampeón sueco de freestyle. O que nuestro Sales Manager había competido en el evento para magnates en las Olimpiadas. Y que uno de nuestros fundadores había acumulado una serie de distinciones en Copa del Mundo. Quedaron muy sorprendidos. Cuando las estrellas locales acompañaron a los comerciales a las montañas para comentar la jugada, de repente vieron la luz.
1996-2000
Diez años más tarde, Peak Performance se convirtió en una gran empresa. Una empresa reconocida, consolidada, muy apreciada y exitosa. Innovando constantemente y renovándose a sí misma.
Peak Performance ya abarcaba grandes horizontes, de izquierda a derecha, de arriba abajo, sin parar de crecer. Peak Performance se había convertido en un estilo, un movimiento, un brillo uniforme, una gran fuerza con individuos fuertes, todos moviéndose hacia el mismo objetivo.
Cuando Peak Performance cumplió su 10º aniversario la compañía era más fuerte que nunca. Continuamos creciendo y los objetivos de la empresa cada vez eran más ambiciosos. Los empleados cada vez tenían más influencia. El motor iba revolucionado y la velocidad siguió aumentando. Los logros cada vez eran mayores
Nuevas tiendas, debut bursátil, victoria en el Whitbread con el yate EF, lanzamiento en el mercado japonés, camisas y chaquetas Gore-Tex ® de tweed de tres capas, nueva oficina, incremento en el precio de las acciones, contratos de patrocinio, una feria detrás de otra y cada vez más empleados. La luz nunca se apagaba en la sede de Estocolmo ya que siempre había alguien con algo que hacer, incluso se llegó a celebrar alguna fiesta interna.
El departamento de Marketing creó la frase “The Great Outdoors” ya que esta marca englobaba mucho más que esquí. Una experiencia al aire libre, deportes extremos, naturaleza, entrenamientos. El deseo de estar al aire libre; de ahí nace Peak Performance.
En nuestro estudio de diseño, en el laboratorio donde desarrollábamos nuestros productos súper técnicos, nuestro saturado y agobiado jefe aún tuvo tiempo de crear la siguiente frase “The Great Indoors” aunque sabía montárselo bien ya que esquiaba 60 días al año y navegaba otros 25, llevando las nuevas prendas de Peak por supuesto. No estaba solo.
2001-2005
Fredrik Jacobsson, Helen Alfredsson, Suzann Pettersen y algunos más. No es un mal equipo de golf. Robban Olsson, Stina Jakobsson, Henrik Windstedt & Co: El equipo Peak de esquí está formado por los mejores esquiadores. Provocan emoción y respeto donde sea que decidan competir.
Peak Performance ha crecido mucho y sigue creciendo. De todas las maneras posibles. Es mucho más que un parche en una chaqueta, siempre ha sido mucho más. Para nosotros es una forma de vida. No importa si se trata de golf o de freeriding.
Peak Performance irrumpió en el nuevo siglo con 2000 nuevas ideas. Algunas de ellas ya se han llevado a cabo. Hemos lanzado nuestro nuevo buque insignia - la gran tienda de Peak Performance en el corazón de Estocolmo. Además abrimos dos nuevas tiendas en Düsseldorf y Dubai.
Hemos ampliado nuestra colección y hemos descubierto nuevos materiales funcionales para aplicarlos en las nuevas prendas. Hemos montado en bicicleta con nuestra ropa Peak sabiendo que ni siquiera hemos recorrido la mitad del camino. Apenas estamos empezando.
2006-2011
El amor por los deportes y la naturaleza. Estos son los mismos principios con los que empezamos hace 25 años. Se trata del amor por el deporte y por la naturaleza.
Estos 25 años han sido un éxito. La empresa no ha dejado de crecer. Cuando miramos al pasado, recorriendo el transcurso de los años, nos damos cuenta de lo increíblemente rápido que ha pasado el tiempo.
El tiempo pasa rápido cuando uno disfruta con lo que hace. Parece que fue ayer cuando nos vino a la cabeza la idea inicial. Fue entonces cuando decidimos reinventar la ropa de esquí. Estábamos en nuestra mesa de dibujo diseñando un sueño que estaba a punto de hacerse realidad.
No ha habido grandes cambios desde los inicios. Obviamente, la estructura ha cambiado y se ha introducido un nuevo sistema de negocio, el número de empleados ha ido creciendo y hemos ido desarrollando nuevas tecnologías.
Peak Performance ha pasado de ser una empresa cuyas “oficinas” se encuentran en un garaje a ser una multinacional que lidera el mercado. La base sigue siendo la misma. Amamos los deportes y la naturaleza. No hay mucho que cambiar aquí. De hecho, nada en absoluto.
Nuestra mirada está puesta en el futuro.
