Como ya os hemos comentado en anteriores temporadas, Kästle es sinónimo de calidad, funcionalidad, experiencia y pasión.
En Kästle creen que, para crear productos de alta calidad, hay que superar las expectativas de los usuarios más exigentes. En ninguna parte son mayores las exigencias y las tensiones para crear un esquí de alto rendimiento que en las carreras de esquí profesional.
Su grupo de desarrollo incluye una impresionante lista de profesionales y corredores de esquí, ingenieros y diseñadores con una gran trayectoria en la industria del esquí. Todos sus esquís están fabricados siguiendo estándares de la Copa del Mundo. Fundamentalmente, su filosofía en el desarrollo de productos es simple. Se preguntan siempre esto: "¿Qué podemos añadir para mejorar el rendimiento de esquí y que podemos obtener con esas mejoras?". Se desligan de los trucos y artimañas que plagan muchos esquís y se centramos en la tecnología más funcional. El resultado: diseños de esquí avanzados y elegantes que ofrecen un rendimiento sin concesiones.
Su experiencia y pasión por el esquí, combinado con las técnicas de fabricación de esquí más avanzados, garantizan productos de alta calidad, construidos para los esquiadores más exigentes. La visión de Kästle es crear la perfecta simbiosis del hombre, la montaña y la nieve con sus sistemas de esquí.
Son una pequeña tribu de esquiadores de toda la vida, con una amplia experiencia en la industria de fabricación de esquís. Dentro de esta tribu, comparten la pasión por el esquí y el deseo de construir los mejores esquís del mundo con los mejores materiales disponibles. Calidad sobre cantidad no es sólo un lema en Kästle, es un modo de vida. En su opinión, la calidad no es la optimización de la producción, sino que es la optimización de sus productos para satisfacer las demandas de sus clientes.
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