En primer lugar y para los que no estén familiarizados con los conceptos, un par de definiciones rápidas.
Catskiing: consiste en acceder a terreno virgen mediante una ratrac que suele llevar una cabina incorporada donde transporta a un grupo de esquiadores. Los deja arriba y cuando llegan abajo, volver a subir y así hasta agotar una jornada.
Heliskiing: Sería lo mismo pero en lugar de ratrac es un helicóptero el que nos sube hasta la cima.
Y aquí tenéis la comparativa:
En el caso del heliesquí sí que es cierto que el nivel lo marca el más flojo, por lo que mejor que vayas con gente muy pareja. Lo que más gracia me ha hecho es el Marital Strife Index.
El catskiing no lo he podido probar, pero tengo muchas ganas. Del heliesquí poco hay que decir, es sencillamente brutal. Una semana de heli en Canadá es una experiencia inolvidable.
En líneas generales, el heliesquí ofrece la posibilidad de esquiar muchos más metros porque la velocidad de subida es impresionante, mucho más rápido que lo que podríamos bajar en una pista pisada a tumba abierta. Como limitación tiene el tiempo, ya que con poca visibilidad, el helicóptero no vuela. En cambio, el catskiing no puede competir en velocidad, por lo que se hacen menos metros, es mucho más barato, menos de la mitad, y el tiempo no es un obstáculo.
Y luego hay otro tema, la cuestión de leyes, ya que hay zonas en las que está prohibido el heliesquí, como en Colorado, en las que el catski es la única opción.
Los precios que aparecen en esta tabla me parecen altos para mi experiencia y lo que he visto por ahí, pero igual ya tienen en cuenta que en un buen día revientas los metros que tienes contratados a priori y las VISAS y AMEX sacan humo.
Y lo de los conceptos erróneos... lo de saltar del helicóptero es un clásico, y quizás tiene la culpa de que haya persistido esta secuencia de James Bond en la que vemos lo del salto desde el heli: