Otra vez, la referencia a superar. La nueva PistenBully PB600 deja obsoletos los patrones conocidos entre las máquinas pisapistas e introduce una revolución sin precedentes. Reúne un diseño, mecánica y tecnologías a la última, y propone una ingeniería de alto nivel que optimiza todas las áreas de trabajo, desde la movilidad y el rendimiento hasta el confort del operario y el cuidado del medioambiente.
Es el modelo más ligero, completo y capaz del catálogo actual; ofrece la mejor relación peso/potencia, el menor consumo y las emisiones más bajas, y añade una cabina con soluciones de vanguardia para otorgar al operario una calidad de trabajo sin parangón, con una comodidad física, térmica y acústica equiparable a la de un automóvil.
La última generación de la máquina roja está disponible en dos variantes principales, PB 600 y PB 600 Polar. Ambas pueden equipar un cabrestante (winche) de gran potencia y movilidad, aparte de diversas palas y accesorios que le permiten adaptarse a cualquier uso, ya sea el tratamiento de las pistas, el acceso a las zonas más complicadas para tareas de mantenimiento o la creación de obstáculos para conformar un parque.
Con un nuevo motor Cummins X12 diésel de 11.800cc y seis cilindros, la PB 600 pone el listón todavía más alto en términos de rendimiento y ecología. La versión 600 rinde 460 CV, mientras que la 600 Polar llega a 520 CV. Las dos incluyen filtro de partículas y depósito de AdBlue para reducir al mínimo las emisiones y reforzar el respeto al entorno. Su limpieza le permite cumplir con la norma Euro V, siendo el primer modelo que lo logra.
Gracias al diseño avanzado del propulsor y a la construcción ligera, emite un 66% menos partículas y hasta un 80% menos óxidos de nitrógeno que el modelo anterior.
La profunda renovación técnica se completa con un depósito de combustible de 300 litros, un 9% más que antes, que proporciona mayor autonomía y amplifica las posibilidades que proporciona la nueva mecánica.
Estructura principal más robusta y trenes rodantes perfeccionados, que incrementan la estabilidad y también la dinámica y la suavidad de desplazamiento. Entre otros puntos fuertes, los ejes soportan ahora hasta un 50% más de carga y la cabina presenta el mayor grado de resistencia de su clase en caso de vuelco: nada menos que 14,5 toneladas métricas. Son solo algunas de las novedades que recoge el reciente chasis de los modelos de Laupheim.
En cuanto a las orugas, se sigue confiando en el diseño diferenciador a base de tejas de aluminio, que contribuye a reducir drásticamente el peso de la máquina (casi 500 kilos).
Luces LED, que no se funden y consumen hasta un 90% menos energía; cámara posterior de gran ángulo para no perder visibilidad en las maniobras, y múltiples automatismos que descargan de trabajo al operario para potenciar la seguridad y el confort. La nueva PB 600 se apunta también a la revolución digital y recoge los mejores avances disponibles en el campo de la operatividad autónoma.
El cabrestante, por ejemplo, resalta por su fiabilidad y permite girar 360 grados sin retorcer el cable, aparte de que integra un sistema de control que vigila permanentemente su tensión y la posición y velocidad de la máquina para evitar percances. Y un conjunto de dispositivos de seguridad adicionales supervisan la trayectoria, inclinaciones y otros parámetros, actuando si fuera necesario, para crear una especie de escudo digital de protección.
Cabina de automóvil
De analógico a digital, y con opción de volante. El puesto de mando se ha rediseñado al 100% aplicando estándares de automoción para aumentar el confort del conductor y simplificar el manejo de las diferentes funciones. Para empezar, el control de la máquina se puede realizar desde las clásicas palancas o a través de un nuevo volante. El cliente decide.
Otra aportación especialmente llamativa es el nuevo Joystick de cuatro vías, que resulta mucho más versátil que el habitual de dos y hace posible manejar casi toda la máquina con solo mover el dedo pulgar. Destaca por su funcionamiento simple e intuitivo y sirve para gobernar las funciones de uso más común: winche, fresa, revoluciones del motor, limpiaparabrisas, trazadores…
Los asientos (con reposabrazos integrado de serie), el equipo de sonido (de la marca especialista Alpine), las pantallas y el panel de control, la climatización, los materiales, la ergonomía, el aislamiento acústico y de las vibraciones… todo se ha cuidado al máximo para ofrecer un confort impensable hasta ahora. Y con la arquitectura única que caracteriza a PistenBully, que a diferencia de la competencia ubica el motor bajo la cabina, se dispone además de una plataforma posterior de transporte (para carga, personal…) que aumenta la polivalencia de uso y añade el punto definitivo para que el nuevo modelo sea, otra vez, la referencia a superar.