Si entre los destinatarios de tus regalos hay un esquiador o esquiadora muy aficionados, con algo de esta lista seguramente triunfarás:
1. Una revista. Si se trata de hacer un detalle, una revista es un valor seguro. Aquí tenemos a Solo Nieve, pero si ya es habitual de esta revista puedes sorprender con alguna publicación internacional.
2. Un Buff. Para presupuestos ajustados. Es algo que no molesta en el armario y siempre viene bien. Unos 25 euros.
3. Unos bastones. Son unos grandes olvidados de muchos esquiadores, por lo que si optas por un producto puntero, seguro que triunfas. Y si tiene de todos tipos, unos telescópicos seguro que gustan.
4. Libro. Una opcion económica y que seguro que le gustará. Carolo es un maestro en el arte de escribir libros.
5. Clases. Muchas veces no se dan clases porque el dinero se destina a otras "prioridades", pero como regalo es una idea buenísima. Pueden ser particulares o participar en un camp. Desde 45 a 250 €
6. Un dia de heliesquí en el Pirineo. Una esperiencia que hay que probar alguna vez. Unos 500 euros.
7. Un equipo completo. Una chaqueta y unos pantalones a juego de la marca que más le gusta. A partir de 1000 €.
8. Bolsa de botas con calefacción. Un capricho que gustará a los más aficionados. No hay como lener las botas a punto cuando llegas a pistas y hace frío. 150 €
9. Forfait. Si no tiene forfait de temporada agradecerá poder esquiar algunos días en una estación cercana que permita un sube y baja. Y si buscas algo diferente, un par de forfaits de noche de Masella puede ser una muy buena idea para quien no lo haya probado.
10. Botín a medida. Una solución para que las botas te sientan como un guante. Unos 250 €
11. Fin de semana o más en una estación que no conozca. Está lleno de pequeños grandes rincones por descubrir.
12. Un poster vintage. Suele gustar y queda muy bien.
13. Una camiseta o pieza de ropa "temática". Para super aficionados, que no quieren olvidar su pasión ni en verano.