No hace falta llevar mucho tiempo en esto para recordar que hace unos años, cuando comprabas unos esquís, podías elegir la fijación que más te gustaba o simplemente, poner la que tenías en los antiguos. Pero llegaron los carving y con ellos unas placas que se adaptaban a un tipo de fijación. Las empresas se fusionaron y se empezó a ver esquí y fijación como algo infivisible, con lo que supuso de incremento de precios, ya que no había opción de comprar las tablas sueltas.
En los últimos años, por eso, muchas marcas de freeride están sacando las tablas sin fijación, que permiten montar la que mejor te vaya, de alpino, de travesía,... Con ello, el usuario vuelve a los orígenes y se vuelve a acostumbrar a mirar fijaciones.
Y con la crisis que atraviesa el sector, quizás sería el momento de plantearse un sistema universal de placas que permitieran el uso de cualquier fijación. Seguro que muchos usuarios lo agradecerían y, quien sabe, quizás volveríamos a ver anuncios de fijaciones. Porque me pregunto cuánta gente compra un esquí en función de la fijación que le acompaña.
En esquís de gama media y baja seguro que sería muy fácil de implementar. El caso más flagrante es el de los esquís de niño, que se utilizan en muchos casos un solo año y las fijaciones, que están nuevas como los esquís, no se pueden aprovechar.