Tipos de bota
Botas principiante
Tienen la horma más ancha, son más blandas y cómodas a la hora de calzártelas y quitártelas. La caña no es tan dura como las botas de más nivel, también porque al principio no sueles imprimir tanta fuerza a la bota.
Botas Nivel Medio
Sujetan más y también duran más. Son más estrechas que unas de principiante y los botines interiores son mejores.
Botas Media Alta
Para un esquiador consolidado, con un nivel bastante aceptable. Proporcionan una gran sujeción, pero sin ser tan rígidas como las siguientes en gama. Se portan bien en todas las condiciones. Si bajas por todas las pistas y quieres unas botas cómodas, esta es tu bota.
Botas esquiador avanzado
Cuando les pides más a las botas. Son unas botas a escala de las de competición, con un botín un poco más cómodo y un índice de flexión menor. Sujetan tanto como las de carreras pero más cómodas. Dentro de éstas tienes las Free Ride específicas para fuera pista: un poco más blandas en flexión, con buena resistencia torsional porque hay más apoyos laterales en fuera de pista.
Botas de competición
Las botas de competición son muy rígidas. Tienen menos índice de flexión porque tiene que soportar en muchas ocasiones una fuerza extrema. Pueden ser un martirio para si no te dedicas a eso, a competir.
La elección, paso a paso
No precipitarse.
No puedes llegar la tarde antes del primer día de esquí de la temporada y comprarte unas botas. Es necesario dedicarle tiempo y paciencia. Hay que probarse varios pares hasta dar con el que te quede mejor.
Acudir a una tienda especializada.
Además, si no has esquiado nunca, antes que comprarte unas tablas, es mejor que te compres unas botas. Son personales e intransferibles, como el DNI. El primer paso es acudir a una tienda especializada donde te asesoren profesionales expertos en material y esquí.
¿Cuál es tu nivel?.
Las botas hay que elegirlas según diversos factores: tu nivel de esquí, tu forma de esquiar y tus aptitudes o forma física. El experto te preguntará si va a ser tu primera vez en la nieve, si esquías cuál es el nivel que tienes y cómo te gusta esquiar... No son lo mismo unas botas para principiantes que unas de competición u otras para esquiar fuera de pista. Pero lo fundamental en cualquier bota, sea del nivel que sea, es que sujete el tobillo y el talón.
Medir el pie.
El siguiente paso es medir el pie, su longitud, anchura y forma. Así descubren cuál es la talla que te corresponde y qué tipo de bota o marca le puede ir mejor a tu pie. La prueba siempre se tiene que hacer con un calcetín técnico de esquí (térmicos, reforzados en puntera, talón y tobillo, elásticos en el empeine…), similar al que luego utilices en las pistas.
¡Esta es tu bota!
- Lo más importante es que te sujeten bien el tobillo y el talón.
- El botín interior tiende a ceder, por eso es mejor que la bota te quede un poco justa. Ni grande ni pequeña, justita.
- Para comprobar si te quedan bien flexiónate: los dedos no tienen que tocar la punta. Si lo hacen es que la bota es pequeña para tu pie.
- En la tienda no tienes que apretarte las botas a tope. Si sujeta en la tienda al mínimo cuando ceda en las pistas tendrás dónde apretar, si no te quedará grande.
- Las botas para mujer son especiales por la diferente anatomía femenina: el tobillo suele ser más estrecho y el gemelo es más bajo, por eso son más bajas de caña para que ésta no roce contra el gemelo. La horma también es más estrecha.
- No todos los pies son iguales. Si las botaste hacen daño en un tobillo, empeine... en la mayoría de los casos pueden solucionarte el problema en una tienda especializada con taller: modifican la bota a tu pie (la carcasa, el botín, la plantilla...)
Con el carving ya no se lleva la bota tan rígida, excepto en las botas de competición. Por lo general las botas acompañan la flexión continua que se hace al esquiar en carving (no extensión-flexión como antes) y se han reforzado lateralmente porque con el giro conducido hay un mayor apoyo en los cantos.
- El Índice de Flexión (Flex Index) indica el esfuerzo máximo de flexión que hace un esquiador. Cada fabricante lo mide de una manera. Es un tope que se coloca a la altura del tobillo, donde se realiza la flexión del pie, y que se puede regular al gusto, para que te permita flexionar más o menos.
- Botines termoformados: el botín se adapta al pie cuando se calienta mediante una máquina. La bota está preparada desde que sale de la tienda para trabajar en las pistas. Algunas botas tienen un sistema de canting o grado de inclinación lateral de la caña, que permite mover lateralmente ésta para adaptarse a la forma de pisar de cada esquiador (por ejemplo, si eres pronador o supinador se corrige con el canting).
- Ganchos micrométricos y macrométricos: permiten regular con mucha precisión la sujeción del pie, tobillo y caña.