El titulo del post viene a cuento, que este itinerario, es eso un mar de nieve por el que navegas, con la vigilancia de las grandes murallas de las sierras exteriores y en un espacio blanco y solitario, donde al final casi llegando a la pista que nos conduce al pueblo, has de agudizar la imaginación, para encontrar las canales que te dejan en la pista forestal, sobre todo si la nieve no es abundante, un mar donde la parte alta, es navegable sin problemas, un mar en el que la sonrisa se instala en tu cara y no la sueltas, hasta que la parte boscosa te haga cambiar el rostro al de la concentración en lo que haces.
Por el navegamos, Anne, Pau y yo ejerciendo de guía, para la juventud, la frescura, la técnica, pero para la responsabilidad y el sentido común, fácil de guiar gente así.
Además el añadido-atractivo de acompañar una esquiadora y un snowboarder, completamente compenetrados.
Por lo demás, sarrios, parajes solitarios, Pirineo en su estado puro, y unas vistas al valle impresionantes, llegar al pueblo y saborear el descenso en el pequeño bar, completo el día.
Gracias a:
Salomon España
Julboeyewear
Suunto
Boutique Nepal Formigal
Y a Anne y Pau.