Una década después de la tragedia el Camping Las Nieves de Biescas
Una tarde de verano aparentemente normal el cielo comenzó a oscurecerse, desarrollándose una fortísima tormenta en el Barranco de Arás que recogía una media de160 litros por metro cuadrado arrasó por completo el Camping Las Nieves de Bisecas.
Tanto los vecinos de la zona como los que en esta bonita zona pasaban sus vacaciones coinciden en que el ”espectáculo fue dantesco”. Los trabajos de rescate se alargó durante varios días, con la ayuda del Ejercito Español con sede en Jaca. Para hacernos una idea de la magnitud de la riada, se encontró el cuerpo de un hombre a más de 15 kilómetros del lugar del siniestro arrastrado por las aguas.
Un articulo del Periodico de Aragón recoge el relato de varios vecinos de Bisecas aun espantados por la tragedia: ”Fue un mazazo psicológico y moral muy fuerte para el pueblo que ya no queremos recordar", admite el vecino de Biescas José Escartín al ser preguntado por la tragedia. "Cayó una horrorosa lluvia de fuego y truenos", dice emocionada Teresa Fernández. "Tanta gente de fuera... Y aquel niño que no encontraban... Es que me afecta todo", dice para justificar su llanto.
"Todo está dicho. Aquello fue espantoso", afirma Feliciano. "Cuando abrieron el Camping de Gavín le ofrecieron trabajar de nuevo a un operario que estaba en Las Nieves, y no quiso saber nada", añade otro vecino con cara seria.
Esperemos no volver a vivir semejante horror y mucho menos por no hacer las cosas bien. Ya que por lo visto, el camping no estaba en una zona segura. Aún siguen habiendo “campings y nuevas viviendas en desembocaduras de cursos naturales de ríos y barrancos". Por mucho que “nosotros” hagamos para cambiar el curso de un río hay que recordar que el agua siempre buscará su curso natural.