Como decían en un anuncio de BMW que pasaba por la noche con todos en el coche durmiendo menos el conductor, "nadie le lee los mapas, nadie le molesta". Es una manera de ver en positivo que te toca esquiar solo. Si te gusta ir solo es que esquiar te gusta de verdad. Y cuando me toca, intento sacar el máximo partido.
Cuando esquías casi todos los fines de semana, subir solo puede dar pereza, pero a principios de la temporada y con material por estrenar, las ganas son infinitas, así que cuando me dijeron en casa que el domingo tenían recados que hacer, no me lo pensé ni un segundo. Además, las previsiones de tiempo eran muy buenas.
Llegando a La Molina, el aspecto seguía siendo muy bueno.
La primera duda del día:
Subiendo por Alabau. Lo de subir solo iba más en serio de lo que pensaba. ¿Era el único que estaba en la estación?:
Unas primeras bajadas con los Omeglass para testear bien las botas (¡Cómo van, qué gran cambio!) y rumbo a pasar palos. Es lo que tiene ir solo, que puedes entrenar con toda la calma y nadie te pregunta a qué hora acabas cuando todavía no has empezado.
Había trazado de GS en Mainaderas y allí me fui tras cambiar esquís:
Estaba haciendo un día de auténtico escándalo y la nieve estaba de cine. No se podía pedir más. Unas bajadas por el trazado y hora de coger la cabina.
Muy poca gente en el parking de Telecabina:
En la cabina confirmé algo que llevo días notando. El personal de La Molina está realmente amable. Hasta lancé un tweet diciendo que en lugar de La Molina, parecía que estaba en Deer Valley porque me cogían los esquís y los ponían en la cabina y los sacaban y me los daban al llegar arriba. Detalles con el cliente. Que dure.
La calidad de nieve seguía buenísima también arriba. El viento ha pelado muchas zonas pero en las pistas se esquía de maravilla. Detalle de Comabella, con la montaña ventada pero la pista perfecta:
Y cayeron algunas Comella +Estadi
El hecho de ir en plan solitario no impide ser solidario, así que poco antes de acabar la jornada me dirigí a la bajada solidaria de la Marató de TV3, que este año recauda fondos contra las enfermedades neurodegenerativas. Una buena causa como esta no se podía dejar pasar. El día anterior había habido otra en Baqueira y al otro lado de la montaña, en Masella, también se hacían bajadas por la misma causa. Bravo por todos ellos. Os dejo unas imágenes:
¿Dónde está Wally?
Momento de volver. ¡Menudas botas que me he agenciado! Me daba respeto el 130 pero nada, es la flexión perfecta. Ya os contaré un día el cambio porque ha sido muy positivo.
En resumen, jornada solitaria con un tiempo inmejorable, muy poca gente, un poco de entreno, acción solidaria y super contento con la elección de botas. Vamos, que volví con una sonrisa de oreja a oreja.